La Angelópolis regresó de un vuelco a su mítica era independentista, vestida de gala para recibir al consumador de la Guerra de Independencia, al general y comandante del Ejército Trigarante, Agustín de Iturbide.

Así, Puebla retornó al 27 de septiembre de 1821, día en el que las monjas agustinas sirvieron el platillo barroco por excelencia, el Chile en Nogada para agasajar al militar del momento en su cumpleaños trigésimo octavo. 

La invasión de militares con sus cabalgaduras no contrastó con los inmuebles de los siglos XV y XVI, durante la conmemoración encabezada por el ayuntamiento de Puebla, con motivo de los 200 años del platillo poblano

Al interior del Palacio Municipal, Don Agustín de Iturbide refrendó la libertad de esta nueva nación, alejada del imperio de España. 

El consumador de la Independencia, captó la atención de turistas nacionales y globales que poco a poco, arriban a Puebla en medio de la pandemia Covid-19. Los visitantes celebraron la representación teatral de la visita de Iturbide a Puebla. 

Bajo esa perspectiva, se priorizó, que este proyecto es parte de la reactivación económica del sector productivo que ha sido golpeado por la crisis sanitaria del SARS-CoV-2. 

"Puebla sin lugar a dudas es una ciudad además de patrimonio, tiene una gran riqueza cultural, gastronómica, pero principalmente la calidez de las personas que aquí vivimos y que ya estamos preparadas para recibir a todas y a todos". 

Rodeados por la milicia del Ejército de las Tres Garantías, se advirtió que en este programa están incluidos siete municipios de la zona metropolitana, además de Pachuca.