Después de negar que existan denuncias penales, acompañadas por órdenes de aprehensión en su contra, el líder de ambulantes Fuerza 2000, Federico López, dijo que no es narcomenudista, explotador de informales ni proxeneta.
Acompañado por un grupo de vendedores, culpó al líder de la 11 de Marzo, Martín Juárez y al "Moles" de todas las acciones realizadas al margen de la ley que ocurren en las calles del Centro Histórico.
El grupo de informales indicó que su líder es injustamente un perseguido de la administración estatal.
Nuevamente, los ambulantes pidieron al gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, no dejarse engañar por los representantes de su gabinete, porque están entambando personas buenas, aseguraron.
“Pdimos al señor gobernador cheque bien a su gabinete porque hay gente mala, que nada más lo está engañando y está encerrando a la gente buena y la hace pasar por delincuentes”, dijo uno de los ambulantes.
López dijo que siempre "ha dado la cara", a diferencia de los que sí solapan a los criminales, como es Martín Juárez, líder de la 11 de Marzo y "El Moles".
“Ni yo ni mi organización nos dedicamos a la extorsión, narco o prostitución. El crimen organizado tiene en la mira a la organización fuerza 2000, Martin, sus hijos, El Moles”, reiteró.
Dijo que a los ambulantes de Fuerza 2000 no los quieren porque ellos no permiten la intromisión de los delincuentes ni realizan actividades ilícitas.
“A nadie se le deja robar por eso no nos quieren, la gente y nos echan tierra, les pido a las autoridades investigar a fondo”.
Sexoservidoras piden una casa para trabajar
Después de las declaraciones de López y ambulantes, un grupo de sexoservidoras, subrayó que, para evitar extorsiones y abusos, es necesario que el gobierno estatal permita el desarrollo del oficio en una casa en el centro de la ciudad.
Las chicas que laboran sobre la 14 Poniente, dicen que mientras trabajen en la vía pública, los abusos y extorsiones de policías municipales y personal encubierto se mantendrán.
Bajo ese panorama indicaron que con un inmueble seguro podrán llevar el sustento a sus hogares, sin problemas en medio de la contingencia sanitaria del Covid-19, que también ha golpeado económicamente a este sector.
Acompañada de cartulinas donde se leía, "Somos sexoservidoras de la 14" y "Somos independientes no somos extorsionadas por nadie", el grupo insistió en pedir a la administración estatal autorizar el uso de un inmueble para ejercer su trabajo de sin ser molestadas.
"Se le ha pedido a Miguel Barbosa una casona, pero no ha hecho caso, pese a que se han metido varios escritos y no nos han dado respuesta a esta demanda", indicaron.
El grupo calificó de urgente llevar el sustento a sus casas a sus familias porque la crisis económica dejado por la pandemia ha reducido el dinero que obtienen.
"Siempre hemos pedido que nos reubiquen, en el centro histórico hay muchas casonas que puede adquirir el gobierno estatal para que todas las sexoservidoras trabajen en ese lugar".
Ante ese panorama, dijo que una casa del Centro Histórico será el parteaguas para la generación de una zona de tolerancia donde puedan estar reguladas.