Al revelar que ya charló con el director de Pemex, Octavio Romero Oropeza sobre la delicada situación que vive la población sobre los 29 kilómetros de ductos de hidrocarburos, localizados al norte de Puebla, el  alcalde Eduardo Rivera Pérez refrendó que su gestión no desalojará a los habitantes que viven en ese sector. 

La víspera durante la reunión con el titular de la paraestatal, dijo, se proyectó la toma de decisiones contundentes en beneficio de ese gran segmento de la población de San Pablo Xochimehucan. 

Recapituló que el personal de Protección Civil ha notificado a 90 familias por estar asentadas en una franja de riego. 

Insistió que en el encuentro con Romero Oropeza, especificó que urge terminar con el robo de combustible en esa  área de la Angelópolis.

Subrayó que esas familias que se instalaron en la zona lo hicieron de manera voluntaria y el gobierno no los puede obligar a retirarse de sus casas.

"(Los ciudadanos) tienen que hacer conciencia de poder estar a tanto que no puede haber este robo de combustible, ya hicimos 90 notificaciones en San Pablo, no tenemos  capacidad para reubicar hasta miles de viviendas en otros lugares”. 

Rivera Pérez insistió que su administración está trabajando en la conformación del diagnóstico en compañía de los tres niveles de gobierno, además para evitar las conductas delictivas que suelen ocurrir en este tipo de situaciones.

“Hay que terminar el diagnóstico, hemos solicitado a Pemex que tome cartas en el asunto y que tome las medidas necesarias en San Pablo, para la seguridad y evitar el robo en toda la zona norte; nos hemos puesto las órdenes del director (de Pemex) para coordinarnos con el gobierno estatal y municipal”.

Anunció que los lugares que ha propuesto la administración del estado para reubicar a las familias que sí están en áreas regulares, será un tema que se desarrollará con la autoridad  estatal