Un grupo de 800 prostitutas rechazaron ingresar al programa de empleo ofrecido por el ayuntamiento de Puebla para abandonar las calles del Centro Histórico y regularizarlas. 

Entre los motivos expuestos por quienes ejercen el oficio más antiguo de la humanidad, se encuentran: no satisfacer sus expectativas económicas y preferir la vía pública para trabajar. 

Bajo esa perspectiva, el secretario de Gobernación municipal, Jorge Cruz, lamentó que no exista avance en las charlas con las organizaciones de sexoservidoras que labora en las calles del centro. 

Valoró que la administración municipal ha ofrecido un abanico de posibilidades reales para regular a este sector de la comunidad, o en su caso, para que tengan otro tipo de trabajo. 

Subrayó que la oferta de empleo es de arranque una apertura de 500 vacantes en diferentes unidades económicas del Centro Histórico. 

"Claro que les hemos ofrecido la alternativa de incluirlas en la bolsa de trabajo que plantearon comerciantes y el presidente municipal (Eduardo Rivera Pérez) para dejar las calles, sin embargo, ellas no lo han aceptado".