El zócalo de Puebla fue el escenario de la "Jornada por la Paz", un evento convocado por la Pastoral Juvenil y diversas agrupaciones católicas con el objetivo de exigir un alto a la violencia y la inseguridad que aquejan al país.

La movilización inició con una concentración en la explanada principal del zócalo, donde los participantes realizaron oraciones y reflexiones sobre la situación de violencia en México.

Durante el evento, se levantaron pancartas y se pronunciaron discursos en memoria de los ocho jóvenes asesinados el pasado 16 de marzo en las inmediaciones de la parroquia de San José de Mendoza, en Salamanca, Guanajuato.

Los asistentes exigieron justicia por este crimen y solicitaron la implementación de medidas de seguridad más efectivas.

A través de un pronunciamiento conjunto, los organizadores hicieron un llamado a la sociedad para convertirse en "constructores de paz" y demandaron a las autoridades gubernamentales un compromiso real para frenar la ola de violencia.

Asimismo, instaron a la Iglesia y a la sociedad civil a promover una Agenda Nacional de Paz que permita generar acciones concretas para la reconstrucción del tejido social.

En paralelo, la Diócesis de Tehuacán convocó a adolescentes y jóvenes a participar en una marcha y un rosario por la paz, programados para el domingo 30 de marzo.

Esta iniciativa busca elevar plegarias por el eterno descanso de los jóvenes fallecidos en Guanajuato y concienciar sobre la importancia de la paz en la sociedad.

Las acciones realizadas en Puebla reflejan la creciente preocupación de la juventud ante los altos índices de violencia que afectan al país.

Con esta jornada, los jóvenes poblanos han dejado claro su deseo de un futuro libre de violencia, en el que la seguridad y la paz sean derechos garantizados para todos los ciudadanos.