De acuerdo con el historiador Armando Ruiz Aguilar, pocos libros documentan la relación existente entre Francisco Villa y Emiliano Zapata, por ello, se dio a la tarea de compilar un libro que expone a detalle la correspondencia que sostuvieron estos protagonistas de la Revolución Mexicana.  

Fue así como surgió el libro “Nosotros los hombres ignorantes que hacemos la guerra. Correspondencia entre Francisco Villa y Emiliano Zapata”, publicado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), a través de la Dirección de Publicaciones.

Al respecto, Ruiz Aguilar señaló que en los grandes movimientos armados o revolucionarios de la historia mundial, se detalla siempre a un primer grupo de principales dirigentes, de los que a la larga sólo se recuerda sólo a algunos de ellos.

Sin lugar a dudas, continuó el historiador, en el imaginario nacional e incluso internacional, ocupan un lugar preponderante las figuras de los generales revolucionarios de extracción popular Emiliano Zapata y Francisco Villa.

Sus vidas y obras no sólo alimentan tanto las páginas académicas y de difusión de la historia, sino que también han enriquecido la literatura, las artes plásticas, la música y el cine, expuso en un comunicado del Conaculta.

Doroteo Arango, quien tomó el nombre de Francisco Villa, nació en la pobreza y por tener que trabajar desde temprana edad para ayudar a sostener a su familia, se perdió de la educación primaria elemental de la época; aún más, tuvo que unirse a la banda de forajidos de Ignacio Parra, porque baleó a un hacendado que intentó violar a su hermana.

Por su inteligencia natural y aprendizaje de la geopolítica de los sitios por donde operaba, en los límites de Durango y Chihuahua, Villa desarrolló una gran destreza y un liderazgo que le ayudaron en su etapa de revolucionario.

En el volumen compilado por Armando Ruiz Aguilar se señala que Villa tuvo la inteligencia para desarrollar su capacidad organizativa, lo cual le ayudó para conformar un bien pertrechado ejército –la División del Norte-, sin haber estudiado la carrera militar.

Por ello su biografía continúa siendo de gran interés para especialistas y público en general, pues conforme pasa el tiempo, aparecen nuevos estudios o testimonios orales que detallan cómo fue su vida.

En la actualidad, en el inconsciente colectivo, muchos mexicanos apelamos a la presencia de los generales Villa y Zapata, en busca de la decencia política que nos permita tener esperanza de un mejor nivel de vida, concluyó Armando Ruiz Aguilar.