El delantero de la Selección Mexicana Sub-20, Erick Torres reconoció que la falta de contundencia fue uno de los principales problemas que tuvo que enfrentar, algo en lo que tiene que trabajar para futuras competencias en las que quiere estar.

“Creo que dentro de dos años si me toca otra vez estar en un Mundial Sub-20, seré contundente, tener esa sangre fría para definir porque eso es lo que decide un torneo tan importante”, dijo.

Manifestó que en términos generales, el equipo tuvo un buen desempeño, con la salvedad que no siempre pudieron reflejar en el marcador el futbol que realizaron.

“Sí, creo que se trabajó bien, se generaron jugadas de gol, pero creo que en los momentos difíciles es cuando tenemos que anotar goles, pero satisfechos y contentos por el resultado”, estableció.

Destacó que el tercer lugar que se conquistó fue debido “al apoyo que dan los clubes a las selecciones, en especial Chivas que nos apoya para estar en la cancha, es importante para que en México haya frutos con la Sub-17”.

Finalmente, descartó que el sabor “amargo” de no haber sido por certero en las ocasiones que tuvo, sea algo que le afecte, definitivamente no, ya que es algo que superó por completo.

“Darle la vuelta lo antes posible, desde que se perdió con Brasil era asimilarlo y darle la vuelta rápido porque esto sigue, si te quedas pensando en eso, no sigue tu carrera, entonces a lo que viene”, acotó.

Finalmente, se mostró listo para integrarse a las filas de Guadalajara, consciente que no será sencillo recuperar la titularidad por el buen trabajo que han hecho en el Torneo Apertura 2011, en el que ocupan el primer sitio de la Tabla General.

“Es trabajar día a día, llegar a Chivas para ser contemplado en el primer equipo, si me toca jugar o entrar de cambio o estar con la Sub-20, es seguir trabajando para lo que viene”, concluyó.