Tres años después de una memorable semifinal de la Champions League, Barcelona y Chelsea vuelven a definir un boleto a la final del máximo torneo de clubes de Europa. Esta vez el partido de vuelta de la eliminatoria no se disputa en cancha del conjunto londinense, sino en el Camp Nou, donde el vigente campeón viene de sufrir su primera derrota de local en 55 cotejos, al caer 2-1 el sábado en el clásico de liga contra el Real Madrid.
 
Como en aquel vibrante duelo de la campaña 2008-09 en Stamford Bridge, el cuadro catalán se encuentra contra la pared tras el triunfo del Chelsea en la ida hace una semana por 1-0 con gol de Didier Drogba. Hace tres años, ambos equipos empataron 0-0 en la ida disputada en el Camp Nou y el Chelsea se puso en ventaja en el partido de vuelta con un gol de Michael Essien que nivelaría en los descuentos Andrés Iniesta para el polémico 1-1 final que clasificó a los catalanes.

En el vestuario Blue se alegraron al conocer que los azulgrana eran el rival a batir para llegar a la final de Munich, pues la vieja guardia de Drogba, Frank Lampard, Peter Cech y John Terry sigue siendo la columna del equipo que cayó en su anterior cruce y afronta la cita con ansias de revancha. El Chelsea no ha perdido contra el equipo de Pep Guardiola en sus seis últimos enfrentamientos.
 
El Barça, que alcanzó entonces la final que luego ganaría, también se presenta al partido con ganas. Con dos derrotas consecutivas por primera vez desde mayo de 2009, prácticamente capituló el título de liga española en beneficio del Madrid y ve la conquista de su segunda Liga de Campeones consecutiva como la validación de su temporada.
 
Guardiola, que apeló al "deseo de volver a ser campeón y trascender" antes de ganar la pasada final contra el Manchester United, es plenamente consciente de que su equipo entraría en un selecto club en caso de conquistar su quinto trofeo continental -y tercero en cuatro años- pues igualaría el palmarés del Liverpool, quedando sólo por detrás de Milan (7) y Madrid (9).
 
"Desde el primer día pienso que lo podemos hacer. No nos vamos a lamentar: partimos con desventaja, pero estos futbolistas tienen experiencia y las han visto peores. Es su hora y no tengo duda que competirán", proclamó Guardiola, que negó que el resultado influya en su renovación y aventuró un Chelsea contragolpeador. "Tendremos que ser pacientes, intensos y aprovechar nuestras ocasiones. El cansancio no importa en una semifinal".
 
El Chelsea sigue huérfano de la copa "orejuda" en sus vitrinas, pese a acariciar el título en 2008, cuando cayó derrotado en la final en una tanda de penales contra Manchester United. "Llevo ocho años aquí y hemos estado cerca. Si jugamos un partido fantástico estaremos en la final", declaró el arquero Peter Cech. "El 1-0 es un buen resultado, pero el Barça es favorito por jugar en casa. Siempre intentamos sacar lo mejor de nosotros contra ellos. Creo que este partido será igual que el primero y marcaremos un gol".
 
La derrota contra el Madrid enfrió los ánimos en Barcelona, donde la afición cuestiona el once de Guardiola ante los blancos, el estado de forma del astro argentino Lionel Messi -que se quedó sin marcar o tan siquiera rematar al arco tras sumar 26 goles en los 15 cotejos previos- y la conveniencia de alinear a Cesc Fábregas y Gerard Piqué ante el Chelsea. La falta de gol del ex jugador del Arsenal, que pifió ocasiones claras en Stamford Bridge y sólo acumula un tanto en sus últimos 19 partidos, ha sido ampliamente criticada, y Piqué no participó de las dos últimas citas, lo que se ha interpretado como un toque de atención del entrenador.
 
"Aquí se habla muy rápido de cambio de ciclo y, después de ganar 13 títulos creo que nos merecemos un poco más de respeto", defendió Piqué, que negó que el Barça tuviera Messidependencia e hizo caso omiso del hecho que nunca haya remontado un resultado adverso en semifinales de Champions. "Ellos son un gran equipo, pero las estadísticas están para romperlas. Estoy convencido de que la gente estará con nosotros. Si jugamos como en Stamford Bridge, tendremos opciones".
 
Sin el central, Barcelona se expone a sufrir el poderío aéreo de los ingleses a balón parado, laguna que explotó el Madrid en el clásico. Y en tanto visitante forzaría a los Blaugranas a marcar al menos tres veces, por el valor añadido de los goles fuera de casa.
 
El chileno Alexis Sánchez, que inició de suplente ante el Madrid, apunta a titular, y Guardiola espera que las molestias físicas de Xavi Hernández no lo aparten del once.
 
Messi es el máximo goleador de Europa con 14 goles, igualando la marca del italobrasileño José Altafini en 1963, y suma 63 dianas en todas las competiciones, a cuatro del récord de 67 del alemán Gerd Müller en la campaña 1972-73.
 
A pesar de permitir 24 remates azulgranas en Londres, el Chelsea salió satisfecho con el resultado de la ida y no parece que el timonel Roberto Di Matteo, pendiente del estado físico de Drogba, vaya a alterar la táctica.
 
El sábado su equipo empató 0-0 en cancha del Arsenal en un gris cotejo por la liga Premier, resultado que le valdría la clasificación el martes. Di Matteo reservó a Lampard, Drogba, Branislav Ivanovic y Juan Mata en el derbi londinense para afrontar con todas las garantías el choque del Camp Nou. Un total de ocho cambios en la formación titular con respecto al partido de ida. El español Fernando Torres jugó de inicio ante Arsenal y apenas destacó, con lo que apunta nuevamente al banquillo, como en Londres.
 
El ánimo de la escuadra Blue se ha visto reforzado bajo la dirección de Di Matteo, que asumió el timón en sustitución del cesado André Villas-Boas.

Desde que el italiano tomó las riendas, el equipo ha cosechado 10 victorias, tres empates y una sola derrota en 14 cotejos, además de clasificarse para la final de la Copa de la FA y remontar un 3-1 adverso contra el Nápoli para alcanzar los cuartos de final de la Champions, donde superó al Benfica portugués.
 
"El grupo ha dado muestras de calidad y ambición. Tenemos la ventaja, pero será difícil", opinó Di Matteo, que calificó la eliminatoria de "50-50" e insistió en que el Chelsea buscará marcar. "El Barça creará ocasiones así que necesitaremos un gol, pero limitando también sus opciones. No podemos fijarnos en el partido del Madrid".