Con un empate a uno en tierras Tamaulipecas, el Puebla F. C. cerró la llave dos de la Copa MX, quedando casi al borde de la eliminación de esta instancia en fase de grupos. 

Rubén Omar Romano mandó un equipo balanceado en cuanto a experiencia y juventud, que ha tenido participación en Copa. El Puebla de La Franja se fue abajo en el marcador apenas a los tres minutos de iniciado el juego, con una desatención de la defensa que permitió que Eder Pacheco rematara sólo en el área para poner el 1 a 0.

Puebla recompuso el camino metiendo en su terreno de juego a los Naranjas mediante posesiones largas de balón. La Franja tuvo dos oportunidades de gol claras; en la primera, Cesáreo Victorino no pudo concretar tras un pase retrasado de Quezada. En la segunda, una descolgada por derecha que ni Brayan Martínez ni Mario Quezada pudieron aprovechar al plantarse frente al arquero.

Mientras que Correcaminos buscó aumentar el marcador con disparos de larga distancia, primero de Nungaray y luego de Dos Santos. Al minuto 60, La Franja empató el juego con un disparo de larga distancia de Pablo González que anidó en la portería naranja después de dejar sembrados a 3 defensores en el camino.

Mario Quezada también tuvo su oportunidad de gol cuando recortó dos rivales y su disparo salió por alto.

Aprender de los errores
Los jugadores descartados para el partido de vuelta ante Correcaminos en la Copa MX trabajaron una primera etapa en Excersite, para después hacerlo en las instalaciones del Club Deportivo La Noria bajo el mando de Norberto Scoponi y Luis Canay. Y es que el duelo ante Atlante representa una gran oportunidad por dar el primer triunfo a la afición en casa y así iniciar una línea ascendente en el campeonato. 

Por ello Matías Alustiza, delantero camotero, afirmó que aún sigue calando la derrota ante Cruz Azul, pero ya se hizo un análisis sobre lo acontecido. 

“Ni hablar, fue un partido de ida y vuelta donde el primer tiempo tuvimos oportunidades y ellos no habían llegado con peligro, pero nos echamos a atrás y ahí perdimos el control”, señaló el argentino.

El trabajo de esta semana es la corrección y precisión en la defensa para evitar caídas como ante Cruz Azul. 

“Sabemos que se jugó bien, fue una lástima porque tuvimos dos errores y perdimos el partido, no los puedes dejar un centímetro porque pasa lo que pasa”, indicó el delantero. 

Ahora la oportunidad ante Atlante y con el apoyo de la afición deberá demostrar el nivel del equipo. 

“En nuestra cancha tenemos que atacar, el domingo lo hicimos, pero es totalmente diferente este equipo, aún falta conocer mejor el sistema, pero ya demostramos que podemos jugar de tú a tú a cualquiera”, afirmó.

Por su parte, Michael Orozco, defensor, destacó que no se pueden permitir errores que se suponían superados del torneo anterior, por ello la exigencia de cada jugador debe ser mayor. 

“Es más de lo mismo, falta de concentración como en el torneo pasado, tenemos que seguir trabajando porque los partidos son muy cerrados y se deben sacar los resultados, principalmente en casa.”

A pesar del mal resultado, Orozco Fiscal le pidió a la afición que apoyen más de lo ya hecho para hacer infranqueable el estadio Cuauhtémoc. 

“Es complicado no ganar en casa, pero no lo pensamos tanto así, por eso le pedimos a la afición que no se desespere porque van dos partidos que son más aficionados visitantes que locales, que vengan y nos apoyen para hacernos fuertes.”