Katy Perry ha sido la elegida para amenizar el intermedio del próximo Super Bowl, la final de la National Football League (NFL) estadounidense, que es uno de los eventos televisivos con más repercusión del mundo.
La próxima edición del Super Bowl tendrá lugar el 1 de febrero de 2015 en el University of Phoenix Stadium de Arizona, Estados Unidos, según ha confirmado la NFL.
"Mi banda está en la otra habitación gritando a la televisión (y unos a otros). No puedo esperar a que sea 1 de febrero", ha dicho Katy Perry en un mensaje en las redes sociales enviado desde Australia, donde está actualmente de gira.
El último Super Bowl hasta la fecha, celebrada a principios de este año 2014, contó con Bruno Mars y Red Hot Chili Peppers como estrellas en el espectáculo del intermedio. Además, U2 estrenó también en ese momento el videoclip de su single Invisible.
Tres razones por las que fue la elegida.
1. Su enérgico y exuberante pop
La música de Katy Perry es esencialmente de lo que está hecho el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl. Gran parte de su catálogo es de alta energía, un pop bailable que es descarado pero en un límite como para no perder patrocinadores.
Y ella tiene un repertorio que puede funcionar: Birthday y Roar de su álbum de Prisma de 2013; o más antiguos pero todavía de moda como Firework, Peacock, California Gurls y I Kissed A Girl.
2. Todos, desde la abuela hasta el niño de 3 años, la conocen
En 2011, Katy Perry empató con Michael Jackson (vaya compañero) en cinco número uno del mismo álbum en las listas de popularidad. Jóvenes y mayores la conocen.
Y cuando decimos jóvenes, nos referimos a jóvenes: Dark Horse ha sido usada para tranquilizar por lo menos a un bebé.
3. Ella hace un espectáculo sensacional
Una de las cosas que los críticos resaltaron del documental de Perry, Part of Me, es el gran trabajo en las presentaciones de la cantante estadounidense.
Desde el vestuario hasta la escenografía, Perry crea su propio país de las maravillas, como cualquiera que haya visto uno de sus videos pueden dar testimonio.
Sólo podemos imaginar el tipo de creación que acompañaría a un espectáculo de medio tiempo del Super Bowl.