Amargo regreso tuvo la Selección Mexicana en Puebla tras una larga espera de 17 años, pues en un juego que parecía "fácil", terminó empatando 2-2 contra el Valencia de España, conjunto ubicado en el penúltimo lugar general de La Liga que vino con más de 10 bajas y estuvo plagado de juveniles. 

El encuentro empezó con una pobre entrada donde Alexis Vega ilusionó a los "valientes" que se hicieron presentes en el Estadio Cuauhtémoc marcado el 1-0 de tiro libre a los 8 minutos de juego, pronosticando una goleada y una fiesta tricolor.

A diferencia de lo pensado, el encuentro cayó en un "bache" futbolístico, pues el Tricolor se quedó sin ideas y el cuadro "Che" tomó confianza en el Coloso de las Maravillas para hacer su propio juego.

Cuando el juego no tenía mayores novedades, México encontró el 2-0 por cortesía de Ozziel Herrera a los 36 minutos gracias a un zapatazo fuera del área para hacer vibrar al Cuauhtémoc que iba mostrando una mejor entrada con puertas abiertas.

Antes de acabar el primer tiempo, el Valencia sorprendió en la Angelópolis y Dani Gómez sacó un trallazo que apagó momentáneamente las ilusiones aztecas con el 2-1 a los 42 minutos generando cierta preocupación de cara al segundo tiempo.

Para el complemento, el conjunto naranjero terminó por exhibir a varios elementos de la Selección Mexicana que se vieron superados por un cuadro juvenil y varios suplentes del primer equipo, dejando una percepicón preocupante en el funcionamiento. 

La hecatombe se hizo presente a los 61' minutos cuando el Valencia empató el partido 2-2 con un doblete de Dani Gómez luego de entrar al área y definir con una media vuelta que dejó sin reacción a Raúl "Tala" Rangel.

A pesar de que el director técnico nacional de México, Javier Aguirre metió a varios titulares como Edson Álvarez y Raúl Jiménez, el partido terminó con el amargo empate 2-2 y con ello, un sonoro y unánime abucheo.