Cerca de 200 trabajadores del Colegio de Bachilleres se presentaron ayer en la sede estatal de ese sistema de educación media superior, para protestar por lo que consideraron una imposición en el gremio laboral de esa institución, aunque poco tienen que hacer porque los integrantes del nuevo comité informaron que recibieron de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA) la toma de nota que los acredita como representantes de los maestros y demás trabajadores del colegio.