Entre porras, aplausos y frases efusivas, fue recibido el rector de la UAP al realizar una visita en la preparatoria Benito Juárez García, donde destacó que los resultados que hoy tiene la Universidad son extraordinarios.
“Hoy tenemos una preparatoria que se erige orgullosa de su presente, pero que tiene, sobre todo, como su principal valor su comunidad universitaria”, señaló ante profesores y alumnos reunidos en la explanada de la preparatoria.
Recordó que a lo largo de su trayectoria académica y profesional por la máxima Casa de Estudios en la entidad vivió muchas experiencias y etapas difíciles: “me tocó vivir los momentos complicados y ser parte de luchas muy serias y responsables por rescatar a la Institución, hasta tener la oportunidad de encabezar los destinos de la Universidad a lo largo de estos ocho años”.
“Yo soy preparatoriano, aquí estado siempre y llevaré en mi corazón el recuerdo de la Universidad Autónoma de Puebla”, expresó con nostalgia, al tiempo de reiterar su compromiso con la Institución y de servir a Puebla.
“Llevo tatuado el nombre de la universidad”, aseveró.
“No habrá nunca en mi vida tanto aprecio, cariño e historia como la que he tenido con la UAP”, indicó al valorar el cariño de su alma mater, así como el respaldo de estudiantes y académicos.