El vocero del Consejo Democrático Magisterial Poblano (CDMP), Miguel Guerra Castillo, aseguró que hasta el último día antes de salir de vacaciones de Semana Santa se reunieron poco más de dos mil amparos en contra de la reforma educativa regresiva, aprobada recientemente por el Congreso de la Unión, y, aunque saben que la lucha que sostienen será complicada, no cederán los espacios porque les asiste la razón.

Junto con el paquete de amparo, que terminarán de integrar hasta el 12 de abril del presente año, el representante de los maestros disidentes del estado de Puebla recordó que mantendrán las movilizaciones y las marchas ante los juzgados laborales porque reclaman derechos contenidos en la Constitución mexicana.

Lo que demandan los profesores democráticos, aseguró Guerra Castillo, es el atropello en contra del sindicalismo magisterial mexicano, por eso reiteró que el proyecto que llevan a cabo no solamente se traduce en una acción legalista, antes bien, se trata de una acción política perfectamente sustentada en el Derecho mexicano, con lo que darán la batalla en contra de las autoridades nacionales.

Y aunque saben que la institución que imparte justicia está corrompida, el vocero del CDMP recordó que no tienen confianza en que los jueces o la Suprema Corte de Justicia de la Nación les otorguen la comisión del amparo en contra del decreto, “sabemos que eso es algo muy difícil pero mantendremos la lucha hasta las últimas consecuencias”.

Miguel Guerra Castillo comentó en entrevista que por esa razón, de manera paralela a los amparos, que son procedimientos legales que llevan a cabo, también están en proceso de conformar movimientos, de generar consciencia y de la movilización política para lograr que la clase magisterial y los trabajadores en general del país sepan que pueden luchar por la defensa de sus derechos fundamentales.

El vocero del CDMP recordó que el plazo para que los docentes se adhieran al amparo general, que presentarán ante las autoridades laborales, vence hasta el 12 de abril del presente año, por lo que reveló que después del periodo vacacional seguirán con la recolección de las firmas que integrarán los amparos que llevarán ante las autoridades laborales.

Miguel Guerra Castillo afirmó que los integrantes del magisterio democrático poblano saben que de la medida que presentarán ante los juzgados es complicado que reciba el visto bueno de las autoridades, “pero estamos seguros que procede legalmente, por lo que no pensamos quedarnos cruzados de brazos ante las injusticias que se cometen en contra de la clase trabajadora”.