Al considerar que la evaluación aplicada a los aspirantes a profesores del estado de Puebla es excluyente y un señuelo para los jóvenes docentes, el vocero del Consejo Democrático Magisterial Poblano (CDMP), Miguel Guerra Castillo, agregó que el examen de oposición que presentaron los aspirantes a ingresar al magisterio poblano es un fraude de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), pero también es parte del proyecto de reforma educativa que se impulsa en el país.

Al presentar el 5 Taller Estatal de Educación Popular, aseguró que los jóvenes aspirantes a una plaza de profesor deben saber que la mayoría de lugares disponibles fueron asignados, y agregó que, contrario a las pocas plazas que quedan disponibles, hay miles de demandantes de empleo, pero solamente se ofertan pocos lugares y eso genera un grave problema en el futuro inmediato de los nuevos especialistas en pedagogía.

Sigue la compra de plazas

En el CDMP —agregó Guerra Castillo— tienen documentados casos de aspirantes que alcanzan resultados aprobatorios y tienen que esperar varios meses y hasta años para recibir una plaza, “por eso encuentran necesario recurrir a prácticas indebidas, a la corrupción, para obtener una plaza”, porque a algunos les dan seis horas en la sierra, pero tienen que pagar casa y alimentos, entonces todo eso significa un señuelo, “una zanahoria”, y una forma de justificar políticas de evaluación que para nada responden a las necesidades de los profesores.

Es por eso que los profesores democráticos rechazan la evaluación, tanto el examen de ingreso como la evaluación universal y el Examen Nacional de Logro Académico en Centros Escolares (ENLACE), que quedan bajo el control del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE), porque son un mecanismo para que la autoridad decida el ingreso y la permanencia.

Ante eso, aseguró que la venta de plazas es una práctica que se mantiene vigente, sobre todo en algunas entidades como Puebla, en las que se perdió la posibilidad de que los jubilados propusieran a sus hijos para ocupar el lugar: “Eso se hace en muchos estados, pero en Puebla hay que resaltar la incapacidad del sindicato, que permitió que se perdiera la posibilidad de dejar esos espacios laborales a los descendientes”, siempre que tengan los perfiles que se requieren. Por lo tanto, muchos profesores tienen que recurrir a la compra de la plaza: “Sigue esa práctica, los docentes no dan su nombre o elementos para la denuncia, es difícil porque cuidan las formas, pero ese es el mecanismo”.

Reducido, el presupuesto educativo

Para Miguel Guerra Castillo el hecho más grave que se debe denunciar es que el presupuesto educativo presenta reducciones permanentes en los últimos años, lo que ocasiona que ya no se entreguen plazas nuevas de parte de los gobiernos estatal y federal, pero además puntualizó que se imponen restricciones, como los exámenes, algo que consideró ilegal porque un joven que cursó estudios de licenciaturas y que fue preparado por el Estado todavía tiene que recurrir a un examen donde le ponen toda una serie de limitaciones para acceder al trabajo: “Por eso rechazamos todas las restricciones para el ingreso, sobre todo porque se desplaza al SNTE, el sindicato perdió todas sus funciones”.