"Lo que experimenta el sector automotriz en Puebla es una disminución de la parte productiva derivada de la incapacidad productiva de sus proveedores", señaló Ignacio Ibarra López, director del programa de Economía del Tec de Monterrey.

El especialista señaló que esto va a ocasionar que además que disminuye la producción, que también se reduce la demanda de trabajo en el rubro, “eso puede afectar, aunque se espera que sea de corto plazo ese problema”.

Señaló, “la parte automotriz es compleja, porque los productores intermedios dejaron de generar esos productos intermedios, para producir autos”.

"Son muchas partes que se necesitan para armar un automóvil, entre ellos están los micro componentes y elementos electrónicos que regulan el funcionamiento del carro y que van desde el arranque, hasta las cuestiones de seguridad y de asistencia”.

Para dimensionar la problemática, dijo Ibarra López, un carro puede llegar a tener hasta 500 micro componentes para su funcionamiento y todas esas partes no se fabricaron.

"Al tener una oferta de este producto disminuida a nivel mundial se ha complicado generar elementos como la producción de pantallas, computadoras y la producción de automóviles".

Dijo que, en tiempos de pandemia, se presentó la escasez de cierto tipo de productos y eso es coyuntural, pues la crisis generó una falta de capacidad productiva para abastecerlos, incluso, por la misma crisis, hubo empresas que dejaron de existir.

En Puebla, dijo Ibarra López, "se observa una recuperación paulatina del empleo, igual que en el resto del país, aunque se traía un déficit, las estadísticas reflejan incrementos importantes".