En el país existe una militarización, pues el ejército está metido en todo, “militalizar el país no genera paz, por eso, el presidente Andrés Manuel López Obrador, apuesta al modelo de seguridad pública más que al modelo de seguridad humana”, dijo José Rafael Grijalva Eternod, docente de Relaciones Internacionales de la UPAEP.

Por su parte, el decano de Ciencias Sociales de esa casa de estudios, Herminio Sánchez de la Barquera y Arroyo, lamentó que las fuerzas armadas sean utilizadas en labores de construcción, de apoyo al campo y hasta como policías.

Dijo, “usufructúan tanto dinero y participan en la toma de decisiones, pero no son los que tienen cargos públicos para tener el poder, incluso ponen a militares en áreas de seguridad”.

Dijo que en México se tiene un gobierno autoritario, que se da la libertad de meter a las fuerzas armadas a realizar actividades civiles, por eso, se arraiga la disfuncionalidad de la política de seguridad, por eso, hay cada vez penas más agresivas y la inseguridad sigue subiendo.

En su intervención, Valente Tallab González, director de la Facultad de Ciencia Política y Gobierno, dijo que meter a las fuerzas armadas a actividades policiacas, muestra que pierde la identidad y el respeto de los ciudadanos, “es el riesgo, porque hay una sobreexposición y un desgaste natural”.

Grijalva Eternod, afirmó que, están en diferentes actividades, que hasta en el CONACYT definen las políticas de investigación para el país, “eso es normal en un modelo autoritario”.


El Ejército es usado como sustituto de la política de seguridad o de infraestructura, dijo Sánchez de la Barquera y Arroyo, además se destinan gran parte de los recursos a las fuerzas armadas.

Lo anterior, mantiene a las fuerzas armadas, contentas y sumisas al poder en turno, además, también genera descontento en las fuerzas armadas.

Lamentó que, en el discurso del 20 de noviembre del Secretario de la Defensa Nacional, pasa la línea de división que tienen las fuerzas armadas, “se apropió del vocabulario de la 4T, de un proyecto más allá de un sexenio, más allá de un programa de gobierno”.