El retiro del seguro que otorgó el gobierno de Estados Unidos, por la pandemia, y que benefició a muchos mexicanos migrantes, puede generar una caída en las remesas que llegan al país desde el vecino del norte.
Así lo aseguró el director del programa de Economía del Tec de Monterrey campus Puebla, Ignacio Ibarra, “al ser las remesas uno de los principales ingresos para México, puede ser un espacio que genere debilidad en la economía mexicana”.
Sin embargo, dijo que, puede haber aumento en los ingresos del turismo y se pude compensar esa caída en las remesas. Reveló que, la otra entrada importante para el país, es el petróleo, entonces, debe cuidarse como la principal fuente de divisas.
“Es una combinación, porque se pueden caer las remesas, pero se aumenta la actividad turística, entonces no se siente tanto el efecto, y si además, el precio del petróleo es el adecuado y está en un nivel alto, eso favorece”.
Si bien es cierto que, las remesas son fuentes importantes de ingresos para el país, casi al mismo nivel que el turismo, se pueden mencionar como importantes las entradas de divisas, como el petróleo, las remesas y el turismo.
Hay un tema que tiene que ver con que al final del día, los recursos que mandan los migrantes, es una cantidad de la fuerza laboral que no se aprovecha en México.
Pero esa mano de obra, está arraigada en otro país y allá genera valor, porque al final del día, estas remesas permiten mantener a muchos hogares en México.
Sin embargo, señaló que, esas remesas dependen de la política migratoria, pero adicionalmente, el tipo de proyectos que se generen, por ejemplo, en Estados Unidos se empiezan a generar normas adicionales sobre procesos de contratación y eso afecta a la parte migratoria, porque se pueden llegar a endurecer las políticas al respecto.
Hay que observar las 3 variables, aunado a la variable económica, para evaluar el comportamiento de la economía mexicana en general.
Recordó que, en algún momento de la pandemia, en el año 2020, el dólar llegó a estar hasta los 23 pesos, entonces ese proceso ya es muy difícil que se pueda observar, aunque puede haber una coyuntura que lo pueda permitir.
Además, destacó que, se mantiene vigente la volatilidad de la moneda, en relación al precio del dólar, “lo que no varían es el valor de las casas, aunque los bienes de consumo tendrán oscilación mayor en sus precios”.
Esto se presenta en la coyuntura del aumento del 20 por ciento del salario mínimo en el país, “lo que vemos con preocupación es la parte de la inversión”.