Dentro de los programas federales de apoyo a la educación, preocupa el rubro en que la autoridad de gobierno del país, entrega dinero a los comités de padres de familia, porque en esos grupos se han detectado desvío de recursos.

Así lo aseguró la coordinadora general de la agrupación Educación con Rumbo, Paulina Amozurrutia, “preocupa porque los recursos económicos que se destinen serán insuficientes, más aún, si estos recursos se entregan sólo a comités de padres de familia”.

De esos programas federales, dijo, no se debe excluir por completo a autoridades educativas y maestros, por eso, ante tal situación, cuestionan que sea a través de los padres y madres de familia que se asignen los recursos.

Sobre todo, aclaró, con los reportes de corrupción que se han presentado. Ya que un informe enviado por el “súper delegado del estado de Morelos”, Raúl Anaya Rojas, el 24 de mayo de 2021, reportó que "en 77 escuelas cambiaron los comités de padres de familia”.

El problema, afirmó, es que la Tesorería de la federación depositó a quienes estaban registrados en los antiguos comités, poniendo en riesgo más de 24 millones de pesos.

Ante eso, Educación Con Rumbo exige que los programas no se cambien con las administraciones públicas, que las asignaciones sean sostenidas en el tiempo, hasta completar al 100 por ciento todas las condiciones de infraestructura de una escuela.

Además, exigen que se asigne un porcentaje mensual a las escuelas para el mantenimiento de la infraestructura y de los servicios educativos.

“Pedimos que exista un sistema de seguimiento a las condiciones de las escuelas y que el proceso de asignación de recursos sea a través del consejo escolar y del comité correspondiente”.

Paulina Amozurrutia, dijo que, esta decisión del gobierno ha generado polémica; y una primera razón es que las escuelas de tiempo completo ya no contarán con recursos para sostener el horario ampliado o completo.

Y es que, para sostener más horas de trabajo se requiere la preparación de los alimentos y apoyar algunos bonos para los maestros que tiene que cubrir actividades.

Lo anterior puede generar varios escenarios, “que las entidades absorban la responsabilidad y destinen recursos para que estas escuelas continúen su jornada completa”.

Asimismo, que los padres y madres de familia apoyen con sus propios recursos para dotar de los alimentos a los estudiantes y continúen sus actividades hasta las 4 de la tarde y que escuelas de tiempo completo se vuelvan irremediablemente en escuelas de jornada ampliada.

Dijo, “para ello la SEP otorgará 150 mil pesos, si la escuela tiene de 2 a 50 alumnos, 200 mil pesos si la escuela tiene de 51 a 150 alumnos y 500 mil pesos si la escuela cuenta de 151 y más alumnos”.

Estas cantidades se entregarán a través de un fondo administrado sólo por padres de familia y consiste en entregar el dinero que los comités de padres deciden en qué obras gastar y supuestamente con quién.

“Si se considera que las escuelas deberán comprobar la necesidad de esos recursos para mejorar su infraestructura, partiendo de que les faltan baños, conectividad, bebederos, techumbre y salones”.

Lo anterior, dijo, supondrá una inversión inicial, por muy pequeña que sea, de por lo menos 450 mil pesos, por lo que no alcanzará para cada una de las escuelas.