El rector de la Universidad Iberoamericana de Puebla, Mario Ernesto Patrón Sánchez, señaló que la estrategia de seguridad implementada por el actual gobierno federal ha imitado casi los mismos métodos de sus antecesores.
El académico subrayó que la administración encabezada por Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no ha cumplido con varias de las promesas planteadas en su plan 2018 para combatir la macrocriminalidad en el país.
En ese sentido, dijo que el Poder Ejecutivo federal ha apostado por la militarización del territorio, dejando de lado la perspectiva de seguridad ciudadana.
En su columna periodística, recordó que en su momento, el político tabasqueño había informado que se conformaría una Guardia Nacional con mando civil, cosa que no ocurrió.
El rector de la Ibero Puebla pidió replantear la estrategia en curso e hizo un llamado al político tabasqueño para atender los señalamientos de organismos internacionales
Apuntó que la Federación haría frente al crimen organizado desde una perspectiva de salud pública con reinserción social, en la que se deba adoptar modelos de justicia transicional reformando el sistema penitenciario.
Derivado de lo anterior, refirió que el plan de seguridad ejecutado por el lopezobradorismo ha tenido resultados pocos eficientes, con mínimas reducciones en el rubro de homicidios.
“El propio Andrés Manuel López Obrador, en el informe presentado el primero de julio en Dos Bocas, con motivo del cuarto aniversario de su triunfo electoral, reconoció que, si bien se han impulsado esfuerzos para reducir la violencia y la criminalidad en la nación, los homicidios no han podido disminuirse sustancialmente”.
Ahí mismo, señaló una disminución estimada de apenas 5 por ciento durante su sexenio, según sus propias mediciones.
Agregó que la baja disminución en homicidios no es una acción relevante en comparación con toda la magnitud de delitos que se han propagado a lo largo y ancho del país.
También mencionó que el gobierno federal actual ha menospreciado las propuestas o iniciativas de la sociedad civil para la construcción de una política ciudadana de seguridad.
“Esfuerzos que lamentablemente han sido ignorados, tanto por éste como por los gobiernos precedentes”.
Patrón Sánchez, indicó que los asesinatos de dos sacerdotes jesuitas y un guía de turistas ocurridos a finales de junio pasado en Cerocahui, Chihuahua, hacen ver que se debe replantear la actual política de seguridad nacional.
Abundó que el Estado mexicano debe atender el llamado de organismos internacionales para revisar la estrategia en curso, que ponga énfasis en las propuestas ciudadanas.
“Los recientes hechos en Cerocahui y cada uno de los hechos violentos que día a día profundizan la crisis de seguridad en nuestro país, hacen insostenible, no sólo en una clave ética, sino también en términos de eficacia, la continuidad de la actual estrategia centrada en la militarización e imponen la urgencia de una nueva ruta de atención integral al problema desde una perspectiva civil, democrática y de derechos humanos”.