La democratización en el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), tendrá que esperar para mejores tiempos, porque ni los dirigentes salientes ni los aspirantes tienen esa característica de demócratas.

Así lo aseguró el dirigente del Consejo Democrático Magisterial Poblano (CDMP), Gilberto Maldonado Maldonado, “eso lo vemos en los que encabezan las planillas”.

“No se ve realmente alguna planilla que responda a las expectativas de un verdadero arranque hacia la democratización de estos espacios de poder del trabajador del SNTE”.

Además, insistió en que, no le ve mucho futuro de momento, “a no ser que al momento en que se designen las directivas, la misma dinámica en el país los lleve a involucrar a las bases”.

El otro problema, aclaró el dirigente de la disidencia magisterial, es que tampoco las bases del magisterio poblano tienen interés en sus dirigencias, porque tampoco sienten que los apoyan ni los representan.

Por ejemplo, dijo que, en los programas de promociones para ingreso, ascensos y mejoras salariales, los trabajadores de la educación sienten a sus líderes un tanto alejados.

Ante eso, Maldonado Maldonado, dijo, “hemos hecho muchos esfuerzos en las regiones y hemos visto una gran indiferencia de la gente, aunque, por el lado de los líderes oficiales están igual, no hay compromisos con las bases”.

Sin embargo, desde que llegan, buscan acercarse a alguna gente que les pueda aglutinar a las bases en las regiones y las respuestas son muy limitadas, entonces, tienen a la gente y la sostienen con promesas, pero no les cumplen.

Es una costumbre ya, que desde que llegan a las dirigencias sindicales, los equipos de las secciones del SNTE, se dedican a hacer política, a trabar acuerdos con diferentes órdenes de gobierno y se olvidan de la representación de los profesores.

Pero no todo es rechazo, dijo el dirigente del CDMP, porque quienes llegan a ir a las reuniones con aspirantes, lo hacen porque sueñan con que les puedan ofrecer algún espacio de ganar la dirección.

Todo esto, dijo, se encuentra en un escenario donde la credibilidad en los liderazgos dentro de las secciones de Puebla, está en entredicho, porque los integrantes del gremio no le creen a sus dirigentes.

“Lo que hemos notado es que hay una gran indiferencia de la gran mayoría de las bases, que la misma dinámica de la imposición, los ha llevado a caer en la indiferencia y hoy no le vemos mucho futuro a la elección que está en puerta”.

De tal forma que, el magisterio poblano espera la democratización de su sindicato y los dirigentes no le apuestan a esa democratización porque les representa ceder el poder y ahí está el dinero, por eso, tendrán que esperar mejores momentos para alcanzarla.