Las reservas territoriales de Puebla están prácticamente agotadas, “se están acabando todas estas reservas que tuvieron un boom en el sexenio de Manuel Bartlett”, además, no cumplieron con el objetivo de crear vivienda social. Para el coordinador de la Maestría en Hábitat y Equidad Socio Territorial de la Ibero Puebla, Zeus Rodrigo Manuel Moreno Cortés, le estamos pegando a estas reservas territoriales, se han agotado y no se cumplió con el objetivo, porque se construyó viviendas residenciales.

Recordó que, las dos más grandes eran las reservas territoriales Atlixcáyotl, en Puebla capital  y la Quetzalcóatl, que está en Cholula, “ambas no cumplieron su objetivo de hacer vivienda social”.

Lo que sucedió, dijo el académico, es que se fueron hacia el objetivo de lo comercial y lo podemos ver con el crecimiento alrededor de la Universidad de las Américas, que son fraccionamientos de interés económico muy alto, y lo mismo sucedió con la Vista y Lomas de Angelópolis.

En el caso de Lomas de Angelópolis, dijo, sigue su crecimiento y por ello, una presión inmobiliaria muy fuerte para los cambios de uso de suelo de vivienda poco accesible económicamente hablando.

Por eso, el tema de las ocupaciones para fraccionamientos de lujo se da a partir de las reservas territoriales que se marcaron en el proyecto de Puebla Angelópolis de los años 90s y justo a partir de esto se empiezan a dar estos cambios de usos de suelo.

Esos cambios de uso de suelo, agregó Moreno Cortés, han traído consecuencias, como la transformación de estos suelos comunales a suelos habitacionales y que originalmente eran reservas territoriales para tener vivienda de interés popular, que terminó siendo para vivienda de interés alto o residencial.

Insistió en que, estas medidas han generado el agotamiento de las reservas territoriales, por lo tanto, las consecuencias tienen que ver con la expansión urbana, los altos costos de las rentas y las dificultades para encontrar vivienda.

Ahora, lo que sucede, dijo el coordinador de la Maestría en Hábitat y Equidad Socio Territorial de la Ibero Puebla, es que la vivienda popular cada vez se va mucho más lejos de la traza urbana.

Lo anterior, apuntó, genera una afectación social grave con respecto al tema de la forma en que se puede adquirir la vivienda, “hoy la vivienda barata está en Huejotzingo, el San Martín Texmelucan, que ya son muy lejanos de los centros como Puebla, Cholula y la zona conurbada”.

Además, también este tipo de fraccionamientos generan un impacto fuerte de los accesos al agua a las comunidades que no la tienen, como Santa Clara Ocoyucan que ha tenido problemas con estos servicios.

“Hoy, la ciudad de Puebla y la zona conurbada tiene un crecimiento acelerado en los dos últimos años, sin embargo, hay que apostarle a la mejora de la calidad de los servicios públicos, al reciclaje, al cambio a energías más limpias, porque de lo contrario, nos expandiremos como la hierba sin ningún sentido”