Las desbandadas de militantes de los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI), responden más a los intereses personales de los políticos, por un cargo público, que a un posible desgaste de los partidos que abandonan.

Para la politóloga de la UPAEP, Claudia Ramón Pérez, los que renuncian a un instituto político, no se van por la derrota de sus partidos, sino porque están pensando más en las carreras individuales, que en el partido.

“Eso es lo que pasaba con antelación, por eso, habrá que ver la forma en que les respondan, porque entre más sean, menos oportunidades habrá, porque hay que repartir en más rebanadas el pastel”.

Por eso, dijo que, un inicio de desbandadas de liderazgos importantes hacia un partido diferente se presenta en el momento en que nos acercamos a las definiciones por las candidaturas y estamos viendo un reacomodo, sobre todo por la forma en que se presentan.

Si no hubiera esa posibilidad, dijo, hubiera menos estos reacomodos, sobre todo cuando ven más oportunidades, además, ven otras oportunidades en otras instituciones políticas, “eso lo vamos viendo y seguiremos viendo”.

“Esto no es nuevo, pero es más visible ahora por los medios y por las redes, pero es algo que se ha dado en otras ocasiones, en ese sentido, el hecho de que lleguen del PRI o del PAN lo hacen más patente”.

Ramón Pérez, reconoció que, los aspirantes de Morena al cargo de gobernador, Alejandro Armenta Mier e Ignacio Mier Velasco, han jalado a priistas y panistas.

Lo anterior, dijo, es que son conscientes de lo que implica el tema de las formas de operar para lograr las candidaturas y están desfondando de los partidos de los que provienen estos personajes.

Otra cuestión que se presenta, por ejemplo, las declaraciones de Jiménez Merino, quien dijo que dejó de sentirse integrado en las actividades del partido y perdió el orgullo de pertenencia, tienen que poner a pensar a las dirigencias de los partidos pero también a los líderes de algunas corrientes dentro de los partidos.

Si bien Jiménez Merino no da nombres, cuando se analiza al PRI se encuentra con la dirigencia y también con los operadores

La fotografía del PRI con el gobernador es muy significativa, por quienes son los que están al frente, los que manejan el partido y los que tienen el nombre, a quien obedecen.

Los partidos tienen que reflexionar lo que propicia esa desbandada, “en la medida en que un partido se va desdibujando, algunos que aspiran a seguir en el escenario político buscan mejores oportunidades en cuanto a las candidaturas y a los puestos".

Lo anterior, porque, por lo general, pensamos en los partidos como entes que tienen candidatos para poder ganar puestos, pero no solamente en eso, porque muchos de ellos, dentro del partido no buscan candidaturas, sino buscan estar dentro del presupuesto.

“En esas reuniones estamos viendo que tienen como objetivo ir estructurando un grupo que les permita operar en aras de la sucesión a la gubernatura y así lo hacen a nivel federal”.