Rumbo a las votaciones para elegir secretarios generales en las secciones 23 y 51 del SNTE, el boicot será una de las herramientas posibles para presionar la democratización del magisterio en el Estado de Puebla. Para el vocero del Consejo Democrático Magisterial Poblano (CDMP), Miguel Guerra Castillo, no sería la última estrategia para seguir, “los maestros debemos de luchar y no dejar de participar en la política sindical y en la política”.
Y es que, consideró, nunca será recomendable abandonar la lucha por sus derechos, “porque todos los jóvenes ya no tienen derecho a la jubilación y el reglamento no es más que puro engaño”.
En el ingreso, la promoción y la permanencia, el Estado se adjudica la normatividad, cuando debe estar contenido en el artículo 123 de la Constitución, como un derecho al trabajo digno y útil, pero su postura sigue siendo de lucha y por eso, llama a los maestros a luchar.
“Hay que seguir las vías que se tienen disponible, la vía legal, que es estar dentro del proceso, con los candidatos, aunque no tenemos una planilla propia, hay que observar y participar”.
La posición del CDMP es invita a participar, dijo, “porque la mula no era arisca” pero hay desconfianza, porque muchos optan por no participar y dejar que hagan lo que ellos quieran, pero no es recomendable.
Guerra Castillo, señaló que, la participación política es importante, “porque no creemos en el fetiche de la ley”, que impone que la ley es inexorable, que no se discute y se aplica, es como poder divino y sus mandatos no se pueden impugnar.
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Contra eso tienen una postura clara, por eso, hay que dar la batalla al desmitificar esa versión del estatuto y de la convocatoria, “hay que cuestionar y aplicar el nombrado pensamiento crítico y las otras formas de lucha”.
El vocero del CDMP, aseguró que, si el boicot se da en algunas asambleas, eso sirve para manifestar el repudio, “sirven los plantones, las tomas de oficina, las denuncias, todo lo que sea posible por la vía política, además de la vía legal, estatutaria y jurídica”.
En la vía jurídica, acotó, no tienen muchas expectativas, al hacer referencia a la convivencia de gobiernos de derecha, “todas las otras vías son de acción directa, pero no vamos a secuestrar a nadie, ni hay condiciones, eso no, ni el terrorismo, ni cosas que se revierten”.
Miguel Guerra aseveró que, no es una vía, porque eso paraliza, ninguna otra forma más que las vías políticas y que la práctica les permite, porque “tenemos derechos a hacer manifestaciones, protestas, denuncias, reclamos al sindicato, que no contestas, pero todas las formas de hacer conciencia hay que usarlas”.
Pero, si no pueden ni armar una planilla entre los democráticos porque no han podido levantar un equipo de 100 gentes, el boicot es parte de la manifestación de repudio, concluyó.