Es alto el riesgo que corre el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), con la polarización de la sociedad en ambos sentidos, a favor y en contra de las reformas impulsadas, advirtió el analista político de la UPAEP, Juan Carlos Espina Von Roherich.

“Vemos que, cuando el presidente ya está de salida, el poder desgasta y un esquema de polarización a nadie conviene”.

De acuerdo al académico, esa estrategia del presidente, al buscar polarizar las decisiones, es un gran error de su parte, pues no le va a beneficiar ni a él, ni a su partido político Morena.

"Tampoco es algo que resulte benéfico para sus seguidores, porque con eso, sigue fomentando un esquema de polarización que, a la larga a nadie le conviene ni a él mismo".

Sin embargo, para el académico de esa casa de estudios la estrategia del mandatario federal existe pensado que le es útil, pero a la larga será un grave error para él mismo.

"Durante más de 4 años de gobierno en el país, el presidente de la República ha marcado agenda desde antes de llegar al poder y sigue haciédolo".

Sin embargo, advirtió que, hay un proceso de desgaste, porque hoy difícilmente, López Obrador, pudiera asegurar que va a contar con 30 millones de votos, como sucedió en el año 2018.

El académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Gobierno aseveró que hoy difícilmente AMLO podrá llegar a la mitad de esa votación alcanzada, “es evidente que, hay un desgaste en la aceptación ciudadana hacia su figura”.

Espina Von Roherich, dijo que, mientras tanto, AMLO sigue fortaleciendo, sigue construyendo, sigue amalgamando su respaldo en su votación cerrada, en su voto duro, pero en el voto que no le era duro que le da el triunfo, hay un desgaste muy grande, hay también un costo por las medidas y la forma en que se ha gobernado el país.

“Hay decepción por los muy malos resultados en muchas áreas, sin embargo, sigue cohesionado su voto duro, el voto duro del presidente hoy es más duro y el voto volátil que le dio el triunfo se ha corrido al otro extremo, buscando la manera de que no se despegue de este proyecto”.

El nivel de aceptación de AMLO es altísimo y el propio presidente lo aprovecha en su estrategia, que es polarizante, “está enfocado en generar polos cada vez más enfrascados y confrontados, aunque tiene un respaldo popular innegable, pero también tiene un rechazo cada vez más creciente y también evidente”.

Finalmente, Juan Carlos Espina aseguró que lo peligroso de esta situación es que el país se está polarizando y las posiciones se vuelven irreconciliable y en cualquier circunstancia esto se vuelve muy peligros.

“Evidentemente el gran convocante es el presidente López Obrador que, está impulsando estas reformas que tiene un altísimo rechazo de aquellos que consideran que los procesos electorales deben seguir siendo organizados por un organismo autónomo y ciudadano. Si el presidente no estuviera buscando este esquema, no se hubiera generado el rechazo", concluyó.