La gran mayoría de los cambios de partidos políticos de muchos personajes de la vida pública se deben a sus ambiciones y deseos de poder y no por una identidad ideológica con el instituto político al que llegan. Así lo señaló el politólogo de la UPAEP, Juan Carlos Espina Von Roehrich, quien afirmó, “lo que estoy viendo, últimamente, es que, finalmente, los personajes se reagrupan con mucha facilidad y pueden cambiar de filiación partidista con mucha facilidad”.
El problema de ello agregó el académico, es que, no queda claro el por qué lo hacen, porque, no pareciera que se pongan distintos programas en la lista, “no parece que hay diferentes agendas ni diferentes proyectos partidistas”.
Contrario a ello, el analista político dijo que, observa, simplemente, reacomodos donde los actores políticos se van moviendo en función de las posibilidades de triunfo que puedan tener en el partido político al que llegan.
Y es que, rumbo a la elección federal del 2024, donde estarán en juego todos los cargos de elección popular en el país, desde la presidencia de la república, el senado, las diputaciones federales y en Puebla, la gubernatura, las diputaciones locales y los 217 ayuntamientos, hay posibilidades de que puedan acceder a una posición de poder.
Ante eso, dijo que, hay grandes áreas de oportunidad en el entorno de la vida partidista y en la lucha por el poder, por eso, las candidaturas vienen con grandes retos y muchos buscarán acercarse al partido político donde vean las mayores oportunidades de lograr una candidatura.
Sin embargo, Espina Von Roehrich, dijo que, no están compitiendo proyectos políticos, sino que, los actores buscan alinearse con base a sus proyectos personales y los tiempos indican que eso seguirá sucediendo, cada vez más cerca del proceso electoral del 2024.
Dijo, por ejemplo, que, lo que ha sucedido en el ámbito del gabinete del gobierno del Estado de Puebla, con los cambios generados con la llegada del gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, es que ha habido una serie de incorporaciones de personajes que provienen del PRI.
Esos priistas, agregó Juan Carlos Espina, se incorporan a trabajar en un gobierno de Morena y resulta que la alianza electoral rumbo al 2024, del PRI va a ser con el PAN.
Entonces, dijo, quedan muchas más dudas, porque es oportuno preguntarse cual es el proyecto que defiende el PRI, qué lo lleva a aliarse con el PAN, en qué tantas cosas coinciden, que puede hacer que vayan en alianza para el 2024.
El analista político de la UPAEP, dijo que, al mismo tiempo, esa agenda política y proyecto político parece no ser tan importante porque al final se puede aliar en el ejercicio con gobiernos de Morena, mientras políticamente van con el PAN, “como que es muy confuso”.
