En los desarrollos de viviendas de alto costo donde se detectan impactos negativos al medio ambiente, son los ayuntamientos los que absorben la dotación de los servicios, ante lo que, son incapaces de tener finanzas sanas.

Para el urbanista de la UPAEP, Octavio Flores Hidalgo, los municipios son incapaces de tener finanzas sanas para poder desarrollarlo, por eso, son procesos que no están garantizados y las desarrolladoras no lo van a cubrir, lo van a pasar al municipio, aunque se cobren los impuestos por esos servicios.

En el momento que ya se municipaliza y ya se vende la propiedad como privada, dijo el académico de la Facultad de Arquitectura de esa institución, ya todos los servicios los brinda el municipio.

Por eso, es con el ayuntamiento con el que hay que negociar, porque de eso, ya se quita la empresa y se ceden todos los derechos al municipio, para que ya se cobran impuestos al usuario, para el mantenimiento de siempre. 

Entonces, agregó, los municipios serán los responsables de que esos servicios, lo que incrementa los costos y al incrementar los costos, no necesariamente se garantiza ni la calidad ni la atención.

Es como un decreto complejo o de un círculo vicioso que, por ende, al no tener los impactos ambientales, tanto de la liberación y el proyecto, como de su mantenimiento y el periodo de vida de los materiales, va a generar un alto costo en la vivienda tal vez mayor, sobre todo en estos lugares habitacionales.

“No se puede hacer nada, porque en la ley no está contemplado, yo hago un desarrollo inmobiliario, lo que hago es vender una mercancía, lo que vendo es un objeto, con un estatus, con unas características que, si tú lo compras, tú ya te haces bolas con ese objeto, como cuando compras un auto, tú gastas en tu gasolina, servicios y mantenimiento”. 

Flores Hidalgo, dijo que, de igual forma, el propietario se hace responsable del costo de la vivienda, “ese es el gran problema, al que nos estamos enfrentando y si no capacitas y no das un manual de mantenimiento de viviendas, obviamente que la gente va a mantener un modo de vivir que no es sostenible en el sitio".

El profesor de la UPAEP dijo que, se tiene que enseñar como dar mantenimiento de bajos costos, pero no lo hacen, eso es un gran problema de sensibilidad y responsabilidad que hay en los desarrollos inmobiliarios.

Dijo, “el gran problema de los desarrollos masivos es la demanda de energía y de recursos, yo puedo prestarte un servicio o un producto obviamente de inmobiliaria, pero no te garantizo, nadie lo hace, que el suelo sea estable para cualquier situación sísmica o que no seas afectado a una contingencia por el Popocatépetl”.

Por eso, no son capaces de decir ni medir los costos que genera su vivienda o sus recursos del hogar y eso provoca que, ante la ignorancia y la falta de conocimiento, los compradores empiezan a tener un estilo o un nivel de vida de tanto gasto que se agotan las posibilidades de poder abastecer esas localidades.

“Entonces te venden una mercancía donde hay una alta ganancia en la inversión y unos altos costos que se pasan al municipio y al usuario, en economía se dice lo siguiente, la empresa se privatiza y la pobreza se estatiza”.