"Las elecciones del 2024 traerán reacomodos en el Congreso del Estado de Puebla y resulta indeseable que este tipo de reacomodos o eventuales desmantelamiento de la forma en que se conforma una legislatura, desemboquen en una parálisis legislativa", advirtió el analista político de la Ibero Puebla, Roberto Alonso Muñoz.
En entrevista con Intolerancia Diario, explicó que, posibles renuncias de diputados en busca de cargos de elección popular o de la reelección, puede permitir la entrada de los suplentes y con ello, desembocar en una parálisis legislativa.
El politólogo explicó que este escenario es indeseable en todo momento, no solo ante una coyuntura electoral, sino ante una falta de acuerdos o ante una eventual división entre los gobiernos Ejecutivo y Legislativo.
"Para evitar parálisis legislativa, tiene que atenderse desde los órganos de gobierno del Congreso local, desde la Junta de Gobierno y Coordinación Política y desde la junta directiva correspondiente".
En ese sentido, reveló que lo restacable es que, tengan que haber acuerdos que no obstaculicen la dinámica legislativa y la atención a los problemas más sentidos de la población.
“En el Congreso hay aspectos que nunca se detienen, por ejemplo, más allá de los cambios que haya en las próximas fechas, el Poder Legislativo tiene que aprobar el presupuesto para 2024”.
Por eso, dijo que no es algo que se dé el lujo de no hacer, porque tienen que ser sensibles a problemas que existen en el Estado y que necesitan de abordaje legislativo, que no tienen que estar esperando únicamente los momentos de tranquilidad electoral.
Alonso Muñoz aseguró que el llamado es que los órganos de gobierno del Congreso local formulen acuerdos institucionales que eviten esa parálisis legislativa y que aun con la coyuntura electoral, porque es natural que los actuales legisladores tomen distancia para reelegirse o contender por un nuevo cargo.
"Lo que se espera, es que eso no suponga un obstáculo o impedimento para que la vida legislativa continúe tal y como ocurre ahorita que están en receso y hay una comisión permanente que sigue procesando iniciativas, las sigue recibiendo, aunque no las puede aprobar, pero la vida de un parlamento no puede parar”.
En ese escenario, el coordinador de la licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública ratificó que los cambios legislativos que vienen se tratan de un movimiento natural en la vida política.
Reiteró que, esas decisiones tienen que verse como natural y ya no tendría por qué llamarnos a sorpresas.
"En el Congreso del Estado, debe haber la capacidad para absorber estos posibles cambios, la tiene que haber porque hay personal de confianza, personal de la estructura misma del Congreso, una secretaría general y un conjunto de unidades administrativas que deben soportar el trabajo legislativo”, finalizó.