La estrategia de cruces peatonales en la Ciudad de Puebla, no resuelve el problema de la movilidad para el peatón y algunas de ellas, como las que se encuentran en la zona de Angelópolis no están hechas para gente que camina.

A decir de la coordinadora de la maestría en Hábitat y Equidad Socio Territorial de la Ibero Puebla, Angélica Pérez Ramos, esas vialidades no tratan de responder a una movilidad sostenible e integral, porque no está incluyendo a todos los sectores sociales.

También es importante decir que la movilidad se trata de la gente que camina, “por ejemplo, validades como la que nos encontramos en la zona de Angelópolis, no está hecha para gente que camina”.

Ante eso, la académica de esa casa de estudios recordó que, en realidad era una pequeña carretera que comunicaba Atlixco con Puebla y ahora se convirtió en una vialidad obligada para gente que camina y esa vialidad no está hecha para eso.

Por ejemplo, ahí hay muchísimos negocios, como todas las agencias automotrices, pero hay gente que camina, se traslada en transporte público y todo ese tramo lo tienen que caminar.

Entonces, sentenció, en lugar de priorizar y de ver estrategias para cruce peatonal o con bicicletas, en esa vialidad aumentan la cantidad de puentes peatonales como si era fuera una buena estrategia y lo único que hace es que es una vía rápida, que no es integral, la movilidad no es inclusiva.

La coordinadora de la maestría en Hábitat y Equidad Socio Territorial de la Ibero Puebla aseguró que lo mismo sucede en el Centro Histórico de la Ciudad de Puebla, donde se prioriza los vehículos automotores.

“Hablando del Centro Histórico esas calles no fueron hechas para la cantidad de tráfico que se tiene hoy en día, esas calles fueron calculadas para otro tipo de tiempos”. Y es que la capital del Estado de Puebla fue fundada en 1531, donde se utilizaba carretas.

Ante eso aseveró, la traza de la ciudad fue diseñada para tener un aforo específico y ahora le ponen una ciclovía en algunas calles que tienen mucho semáforo, por eso, la movilidad no es la adecuada.

Hay calles dijo, que no están preparadas para soportar un transporte público masivo o transporte privado masivo “y aquí, En la Ciudad de Puebla eso es lo que está pasando”, lo que complica la movilidad y deja al peatón al final de la pirámide de movilidad.

Cabe señalar que el desarrollo sostenible es la satisfacción de las necesidades actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades.

La movilidad es el derecho de todas las personas de trasladarse en el entorno para suplir sus necesidades, sin embargo, cada grupo poblacional se moviliza de manera distinta.

Por eso, la movilidad incluyente es que la totalidad de las personas tengan los satisfactores de movilidad que su situación le exige, si tener que recurrir a otras formas que les generan mayores costes.