Algunas personas con capacidades diferentes celebraron el Día Internacional del Discapacitado frente a las cámaras y reflectores, pero otros sufren la inequidad o discriminación en los apoyos de parte del gobierno estatal.

Decenas de discapacitados se tomaban la foto con la presidenta del DIF estatal, Martha Erika Alonso de Moreno Valle, mientras que por lo menos dos organismos civiles buscan afanosamente un lugar donde trabajar y diversos talleres corren el riesgo de desaparecer en el ayuntamiento de Puebla.

Fuentes confiables del municipio de Puebla informaron a Intolerancia Diario que estudian desaparecer diversos talleres de capacitación para discapacitados, al parecer por falta de recursos. En tanto el organismo civil Vida Abundante, representado por Eva Aranda Díaz, finalmente fue desalojado por el DIF estatal la semana pasada de un pequeño espacio en el inmueble ubicado en la 4 Oriente 806, donde impartían gratuitamente talleres de manualidades.

En otro caso, la Asociación Cultural, Recreativa y Educativa para Sordos, representada por Anahí Puente Romero, continúa dando clases en una pequeña casa de interés social al sur de la ciudad, gracias al apoyo de un padre de familia. Lo anterior, luego de que la administración morenovallista suspendió el subsidio para la renta de un departamento en el centro de la ciudad donde impartían clases a niños sordomudos.

Esta situación derivó en que más de 160 niños y adultos dejaran de asistir a clases especiales para sordos, donde aprendían a comunicarse mediante lenguaje de señas, a pesar de que en Puebla se carece de este tipo de instituciones.

“Le dábamos el servicio a 168 sordos adultos y 21 niños, les enseñábamos lenguaje de señas, alfabetización y lectoescritura, pero ahora sólo quedan trece niños, ya que muchos se fueron por lo lejano y pequeño de la escuela”, dijo Ana Isabel.

Reclamos ignorados
Desde hace más de cuatro meses la Asociación Cultural, Recreativa y Educativa para Sordos se quedó sin espacio al desaparecer La Casa del Sordo, donde se impartían clases a decenas de niños de entre 4 y 17 años con este problema físico.

Pero los problemas iniciaron desde el año pasado, cuando a finales del gobierno de Mario Marín se suspendió un subsidio para el pago de la renta de un pequeño departamento en la 7 Poniente 309 del Centro Histórico.

Con la llegada del gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas no sólo las autoridades no continuaron apoyando con la renta, sino que además les fueron retiradas despensas a las familias de los niños de escasos recursos.

Posteriormente, en agosto —como medida de desesperación— tomaron clases en el zócalo de la ciudad más de una veintena de niños sordomudos, luego de que desalojaron su escuela por falta de pago en la renta. Los estudiantes y sus maestros sacaron las bancas y el pizarrón para pedir apoyo no sólo a las autoridades del gobierno estatal y municipal, sino a la misma ciudadanía porque no tienen un solo peso para seguir impartiendo las clases.

Posteriormente, el diputado federal Óscar Aguilar ofreció una casa para que se instalaran, pero todo resultó falso y mediático porque no era propietario del inmueble, pero también fueron desalojados.

Ahora sólo trece alumnos toman clases en un pequeño departamento del sur de la ciudad en la colonia Vicente Guerrero, propiedad de un padre de familia, donde sobreviven gracias a cooperaciones particulares.

El resto de los estudiantes —más de 160— han tenido que dejar de tomar clases de señas para comunicarse, ya que debido a su precaria situación económica la escuela les queda lejos, a pesar de que el estado carece de centros educativos especializados para la atención de más de 14 mil niños sordos, quienes al concluir la educación primaria la gran mayoría se ve forzado a salir de las aulas.

La constancia
Ana Isabel Puente Romero, representante legal de la Asociación Cultural, Recreativa y Educativa para Sordos, fundada el 8 de agosto de 1997, dijo que llevan una ardua labor permanente para capacitarlos en talleres.

“Les enseñamos a fabricar sus propios productos y a darles herramientas para subsistir, nunca tuvimos un espacio para las actividades propias de su desarrollo.

”Ante este problema se refleja una ironía implícita por una discapacidad que no se ve, y que también se presta al surgimiento de vivales que se hacen pasar por sordos para sus propios fines.

”Esto ha devenido en la resistencia ante las necesidades de personas sordas, la discriminación se da en todos los niveles sociales y de todas las formas posibles”, dijo la activista en los derechos de los sordomudos.

Detalló que el proyecto creado lleva por nombre de “Sordos con Sordos”, ya que cuatro maestros con este mismo problema enseñan a los niños que van desde los 4 hasta los 17 años de edad.

“Tenemos maestros que no son o no han sido aceptados en los trabajos laborales y que han vivido la misma marginación en escuelas públicas, son los que fueron contratados”, indicó en los momentos en que una docente agradecía a los niños con lágrimas y señas el tiempo que pudo enseñar, ya que se retiraba por cuestiones personales.

“En cuanto al IAPEP, le solicitamos un inmueble de los muchos que existen en propiedad del gobierno estatal y la respuesta fue negativa.
”De la SEP le solicitamos la clave de la escuela especial para sordos, pero lo único que recibimos fueron respuestas negativas e irresponsables por parte del secretario y amenazas a quienes nos apoyan en la enseñanza escolar, por parte de sus enviadas, con propuestas sin sentido.

Talleres
El organismo civil Vida Abundante también busca un espacio, luego de que esta misma semana el DIF del estado sacó sus últimos utensilios de un pequeño local donde impartían clases de manualidades.

Eva Aranda Díaz, representante de la organización civil, señaló que sus últimos utensilios fueron sacados del local ubicado en 4 Oriente 806 y ni siquiera se los entregaron. “Me dijeron que los tienen en la azotea echándose a perder”.

El mismo DIF del estado desapareció becas de 50 pesos diarios por dos meses para su preparación, como lo documentó Intolerancia Diario.
La misma dependencia en una carta aclaratoria emitida a este medio, calificó al lugar donde laboraban haciendo artesanías niños y jóvenes con discapacidad, como un seudo taller. Justificó el desalojo al afirmar que no existían planes de estudio para las personas con capacidades diferentes y, a grandes rasgos, que Eva Aranda carecía de capacitación.

Sin embargo, la situación ha afectado tanto a las personas con capacidades diferentes, que se ha registrado un suicidio de un joven invidente de 34 años de edad, quien por la falta de apoyo se deprimió tanto que determinó quitarse la vida.

Ante la situación, familiares de las personas con discapacidad han escrito cartas —algunas incluso a mano— para el gobernador Rafael Moreno Valle, para que se les otorgue un espacio donde puedan desarrollar un oficio.

En las cartas expresan su total apoyo a Eva Aranda Díaz, o “miss Eva” como la llaman cariñosamente, por el tiempo entregado altruistamente en la enseñanza de sus alumnos con discapacidad.

“(…) nos dirigimos a usted ya que sería una falta de consideración dejar a nuestros jóvenes sin un lugar donde puedan capacitarse para el trabajo”, escribió uno de los familiares.

“Tengo un hijo discapacitado que atiende muy diligentemente la maestra Eva Aranda en una aula que tenemos asignada para enseñar a niños con discapacidad (…) solicito su valiosa intervención para evitar que se desaloje dicha aula, ya que no cuenta con ningún subsidio ni apoyo económico”, refirió en su carta Jorge de los Santos Díaz.

“Soy madre de familia, viuda con dos hijos y uno de ellos es un niño especial ya que tiene muchísimas limitantes, su nombre es César Alberto Morales Cesín y lleva dos años asistiendo al taller.

”(…) no nos cobran nada, su labor es totalmente gratuita, adora a los pequeños como si fueran suyos —en referencia a miss Eva— porque los defiende ante tanta discriminación (…) le suplico nos ayude ya que somos de escasos recursos y llevarlos a este taller es una bendición”, indicó la señora Dolores en otra misiva firmada.

Cancelación de apoyos
En entrevista para Intolerancia, Eva Aranda Díaz informó que los dos talleres que se imparten enseñan a invidentes, con síndrome de Down, retraso mental y psicomotriz, a pintar, cortar y clasificar.

Incluso cada año en diciembre hacen piñatas que logran colocar muy bien en el mercado, pero en esta navidad de 2011 no contarán con un taller.

Indicó que la única circunstancia por la que serán desalojados es que no deja nada de ganancias o dinero para el gobierno estatal.
Además, explicó que anteriormente contaban con tres salones con 25 alumnos cada uno, pero dos ya han desaparecido por dos causas: la falta de espacio y por la desaparición de becas para los estudiantes, la que los ayudaba a acudir, al ser de escasos recursos.

Detalló que la beca la obtuvieron cuatro ocasiones en el sexenio anterior la que duraba apenas dos meses, pero a pesar de lo raquítico del apoyo de 50 pesos diarios a cada estudiante, ahora fue suspendida desde que tomó posesión el actual gobierno del estado.

“Ellos vienen tres veces a la semana, martes, miércoles y jueves de diez a dos de la tarde y con ese dinero podían pagarse sus traslados”, dijo Eva Aranda.
—¿Por qué los desalojan?
—Textualmente me dijeron que porque no deja nada al nuevo gobierno. Así se lo digo yo, no trabajo para que el gobierno tenga, yo trabajo para enseñar a estas personas y lo que aprendan en un futuro los beneficie.

La fiesta oficial
El Sistema Estatal DIF (SEDIF) se adelantó y conmemoró el Día del Discapacitado con 24 horas de anticipación, “para generar la concientización en la gente de lo que significa la discapacidad”.

En el evento, Martha Erika Alonso consideró que la gente no tiene la cultura para respetar a las personas con discapacidad, ni los espacios que se habilitan para ellos. Asimismo, indicó que es necesario que estas personas adquieran la responsabilidad de respetar a este sector marginado de la población.

El director del SEDIF, Carlos Alberto Julián y Ruiz, detalló que en el estado de Puebla hay un total de 287 mil 851 personas con algún tipo de discapacidad, un 4.9 por ciento de la población, la mayoría con problemas motrices.