La ceniza volcánica dependiendo de sus componentes químicos, la cantidad y las condiciones climáticas, pueden enriquecer la tierra y beneficiar a las plantas a corto, mediano y largo plazo, aseguró el doctor Alejandro Cebada Ruiz, director de la Escuela de Biología de la BUAP.
Consideró que como todo proceso que tiene la tierra, entre más organismos que se encarguen de la descomposición de los elementos que tiene la ceniza, las plantas podrán a aprovechar mejor los nutrientes, de lo contrario aunque estén ahí, si se mantienen como elementos complejos no se podrán utilizar.
Por su parte el maestro en ciencias Porfirio Martínez, profesor visitante de esta unidad académica consideró que la ceniza alenta el proceso de fotosíntesis en las plantas, en tanto ésta no sea retirada de sus hojas por el viento, esto sin embargo no provoca tanto problema porque los organismos vegetales tienen la capacidad de suplir lo que pierden.
Debido a esto, los agricultores tienen que agregarles elementos traza que se pueden encontrar en la ceniza de los volcanes, que cuando cae al suelo y hay lluvia, se puede ir filtrando e integrándose a la tierra, que se verá enriquecida a mediano y largo plazo.
Las partículas de ceniza son proveedoras de microelementos como son magnesio, boro, manganeso, vanadio y polifeno, entre otros, que permiten a la tierra recuperar elementos que pierde por el uso agrícola.
“Las plantas consumen elementos básicos como nitrógeno, fósforo y potasio que son fundamentales para su desarrollo, pero también requieren de manganeso, magnesio, boro, vanadio y silicio, entre otros elementos que se van escaseando por el uso agrícola”, explicó el especialista
Agregó que las personas que viven en las ciudades pueden recoger la ceniza y revolverla con la tierra que tiene para sus macetas y utilizarla, o bien en su composta y aprovecharla.
La doctora Rosa Andrés Hernández, profesora investigadora de la Escuela de Biología, recordó que la ceniza volcánica es la base a para la formación de suelos porosos que permiten retener el agua y el beneficio para las plantas dependerá de la cantidad que caiga y las condiciones del suelo
Si los depósitos son de un espesor menor a cinco milímetros y hay viento o lluvias fuertes, no pasa nada, porque se las lleva y deposita en el suelo y el agua las filtra, sin embargo si es mayor y sólo caen gotas de lluvia, estas se solidifican y pueden pegarse a las hojas dañándolas. En el caso del suelo cuando la capa es mayor a los 50 milímetros y sólo llovizna se pueden dañar los pastos.
Dijo finalmente que cuando la ceniza contiene azufre y altas concentraciones de calcio puede elevar el PH del suelo y acidificarlo.