No obstante, precisó que los concesionarios ya cedieron sus unidades para “gozar” del beneficio que produce el metrobús, por tal motivo no pueden adquirir unidades, solo acciones.
En entrevista, el legislador reveló que algunos transportistas que se adhirieron al Sistema RUTA se encuentran inconformes con el gobierno, porque no han visto los “frutos” del metrobús y desean tener una ruta alterna.
Señaló que en concreto dos concesionarios de Tlaxcalancingo se encuentran inconformes porque se quedaron con “carros seminuevos”, por eso es que quieren una ruta alterna, pero no es posible que se les otorgue cuando se les está haciendo socios en este sistema, ya que no se vale que sean “desleales a su propio negocio”.
Al intentar defender al sistema comentó que ahora estos transportistas son accionistas, porque dentro de este esquema participan empresas privadas, gobierno y transportistas. “No se puede trabajar con deslealtad en este negocio, si no, no es negocio para nadie”.
Advirtió el diputado Jorge Garcilazo que será hasta dentro de dos o tres meses cuando sea redituable. “El metrobús no es negocio si le pones rutas en el mismo carril que ellos. Lo que me han dicho es que ‘no la ven’, porque ya entregaron las unidades que operaban pero no ven los frutos”.
Precisó que algunos de los cuestionamientos que le van a hacer durante la comparecencia del 7 de febrero al secretario de Transportes Bernardo Huerta Couttolenc, será precisamente lo relacionado con el tema del metrobús.
El legislador panista reconoció que los transportistas no están acostumbrados a que alguien más maneje su negocio, pero a la larga con sistemas como el de RUTA, es redituable, porque es manejado por profesionales.
Aclaró que el Congreso no va a intervenir en este asunto, porque a nadie se le está obligando a participar, por consiguiente los transportistas no podrán tener rutas alternas al metrobús.
Bomba de tiempo
Aun no cumple un mes de funcionar y los problemas crecen, ayer 50 trabajadores de la RUTA exigieron a la empresa Heureka el pago de su quincena. Los inconformes fueron contratados como orientadores del usuario.
Ayer, la empresa citó a los trabajadores en el banco Santander, ubicado en la avenida Juárez y calle Tlaxco; sin embargo, los representantes de la empresa no llegaron. Los inconformes se trasladaron a las oficinas centrales de la empresa Heureka, ahí una comisión entró para llegar a un acuerdo.
Los trabajadores percibirán por quincena un sueldo de 3 mil 500 pesos.