Explicaron que el paciente Gustavo Manuel Buendía Guillén, de 50 años de edad, llegó a atenderse un cuadro de cáncer en el colon, pero desde el primer momento recibió malos tratos que lo llevaron al quirófano, donde le practicaron una operación.
“Está ahora en terapia intensiva, presenta el abdomen abierto; a pesar de eso, él está en un entorno poco higiénico, todo por la falta de atención del personal”, explicó su hijo.
Señaló que todo se derivó por una mala práctica tras una fístula o herida posterior a una cirugía de reconexión de colon mal realizada, la cual practicó el médico Jhonatan Ramírez Castañeda, aseguraron.
“Ahora ni es capaz de mirarnos a la cara para darnos una explicación, y esto es un caso en específico, pero es denigrante lo que se vive día a día en el hospital”, señaló.
Debido a esta situación, interpusieron una denuncia ante la Comisión de Arbitraje Médico, además de que presentaron una denuncia ante el Ministerio Público, que abrió la averiguación previa 213/2014/CENTRO. “El daño es irreparable, le desgraciaron el intestino. Si mi padre sale vivo, no va a poder ingerir alimentos. Su alimentación va a ser vía vena y lo que buscaba que era reincorporarse a la vida laboral; va a ser imposible”.
Pidieron más atención al IMSS para los pacientes que están siendo mal cuidados y mal tratados por personal deshumanizado, pues el hecho está costando vidas humanas: “Cuando reclamábamos buen trato, nos dijeron que primero nos fijáramos donde estábamos, degradando a la institución, justificando su falta de profesionalismo”.
Añadió que al estar en el hospital se percató de algunos malos tratos, como cuando a la gente, al preguntar por la presión de su paciente, le decían que el aparato no funcionaba: “Al solicitar un lavado quirúrgico, un grupo de médicos alegó que el quirófano estaba ocupado, mientras que otro médico argumentó que no se lo habían autorizado, el quirófano, manejando doble discurso.
”En otro caso, una enfermera, al mencionarle que mi paciente requería medicamento para el dolor, me dijo: ‘Sí se lo pondré, para que me deje dormir’. Éste es el tipo de argumentos a los que nos hemos enfrentado por parte de gente profesional que nos trata de esta manera”, añadió.
Indicaron que el pasado lunes personal del IMSS no le dio permiso de ingresar al agente del Ministerio Público ni al médico legista para que iniciarán las investigaciones, pero finalmente este martes pudieron ingresar para iniciar las indagatorias.
Acusan malos tratos en clínica de Matamoros
El 1 de agosto del 2013 este rotativo publicó la historia de “Samy”, como era llamado de cariño, en diciembre cumpliría los 13 años de edad y se estaba alistando para ir a la secundaria en el municipio de Tilapa, pero el dengue acabó con su joven vida.
Su papá, José Manuel Huesca Tovar, no lo soportó y soltó en llanto cuando en entrevista acusó al hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Izúcar de Matamoros de malos tratos e incluso negligencia médica en el tratamiento de su hijo.
También los familiares de las victimas acusaron a la Secretaría de Salud de no llevar a cabo acciones preventivas como la fumigación a tiempo.
A unas cuantas casas, su vecina Ana Laura, de 22 años de edad, fue víctima mortal de la enfermedad, conocida en la zona como “la quebrantahuesos”.
Estas familias son algunas de las tantas que han acudido a los nosocomios de esta región de Puebla, donde se encontraron no sólo los cuartos llenos, sino hasta los pasillos, pero poca atención ante la saturación.