La “piratería” en Puebla es uno de los negocios más rentables, ya que sólo se requiere de una inversión mínima para obtener ganancias hasta del 300 por ciento, incluyendo cuotas a líderes de vendedores y algunas autoridades.

Tan sólo en el centro comercial Jorge Murad Macluf —conocido comúnmente como “La Fayuca”—, la venta de películas, programas de cómputo, videojuegos y música es indiscriminada, por lo que según los mismos comerciantes se logran ganancias de hasta 20 millones de pesos anuales.

Una encuesta realizada por la Canaco a 640 personas de la ciudad de Puebla reveló que 74 por ciento de los entrevistados reconoce que ha comprado un artículo “pirata” en los últimos seis meses. Entre los poblanos que consumen “piratería”, prefieren, en 74 %, discos compactos, ya sean musicales o DVD; 13%, videojuegos; 4%, lociones; 11%, ropa, y sólo 1% vinos y licores o medicamentos; otros productos, 3%.

Otro punto interesante que arrojó el análisis es que la gente compra “piratería” por tres motivos, principalmente. El primero es el bajo costo, el segundo es por cuestión cultural y el tercero, por desconocimiento de la procedencia de la mercancía.

Fuentes del mismo mercado —quienes pidieron anonimato— indican que se dan cerca de 4 millones de pesos anuales de cuotas como “pago especial”, lo que exige la mesa directiva del mercado, lo cual supuestamente destinan para pagar “protección” y evitar decomisos.

Para abrir un local de discos compactos “pirata” en “La Fayuca”, sólo se necesita adquirir como mínimo un lote de 2 mil 500 películas, incluyendo las que ni siquiera han sido en salas de cine, como el film mexicano 2033.

Para adquirirlo se necesita viajar a la zona de Tepito, en la ciudad de México, donde se pueden comprar las películas hasta en cuatro pesos y de menos calidad, hasta en dos pesos. Las de mejor calidad cuestan seis pesos. Si se toma en cuenta que los DVD de seis pesos se llegan a vender hasta en 20 pesos cada uno, la ganancia neta llega a superar el 350 por ciento.

Pero hay que restarle la renta del local en “La Fayuca”, donde puede contratar hasta en 7 mil pesos mensuales, aunque mientras más cerca esté de las entradas, más costoso será. A los “gastos” hay que sumarle mil 500 pesos más del “pago especial” cada 30 días, y 800 pesos por consumo de energía eléctrica bimensual.

En “La Fayuca” se calcula que por lo menos 250 de los locatarios se dedican a la “piratería” de películas, música, software, videojuegos y otros artículos. Gracias a este tipo de mercados o centros comerciales, Puebla ocupa el octavo lugar en tráfico de productos apócrifos, según la Procuraduría General de la República (PGR).

Los por qué

Los altos costos para entrar a una sala de cine ante la crisis es uno de los factores principales por los que ha crecido la “piratería” en Puebla, ya que es preferible, sobre todo para familias grandes, gastar 20 pesos a 300 en entradas.

La “piratería” en México es un delito socialmente aceptado y tolerado por el gobierno y por los ciudadanos, lo que ha provocado niveles altísimos de impunidad, dijo el representante de la Asociación Mexicana para la Protección de la Propiedad Intelectual (AMPPI), Mario Roberto Castañeda Franco.

La situación socioeconómica juega un papel determinante en esta problemática y si se ha dado una responsabilidad para la falta de atención del problema en manos de los gobiernos, también la iniciativa privada debe poner mucho de su parte: "La iniciativa privada tiene que ofrecerle al consumidor productos a precios accesibles, en el momento accesible y en el lugar accesible para todo consumidor".

El impacto que esto trae para el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y para el Impuesto al Valor Agregado (IVA) está significado como un negocio de entre 10 mil a 12 millones de pesos que no ingresan como tributación, con lo que, de poderse captar a través del comercio organizado, los tres niveles del fisco se verían beneficiados.

El representante de la AMPPI expresó que las capitales de la “piratería” son Guadalajara, Monterrey y Puebla, así como el Distrito Federal. Expuso que la “piratería” ha sido aceptada por la sociedad ya que durante muchas décadas los gobiernos no pusieron atención al problema, se dejó crecer, además que la población mexicana tiene un gusto para consumir este tipo de productos.

“Es socialmente aceptado, tolerado, y eso nos ha llevado a niveles de impunidad altísimos", reiteró. Da la impresión de que el problema es exclusivamente federal porque las leyes bajo las cuales se sancionan estos actos son federales, ya que las autoridades que combaten la piratería son del orden federal.

Sin embargo, se requiere de la participación de los gobiernos locales en un tema fundamental, que es la regulación del comercio informal, por lo que se debe exigir a las autoridades locales que regulen e inspecciones las actividades mercantiles y de comercio.

No todo es DVD

Estimaciones conservadoras del sector comercio indican que ocho de cada 10 videos, cinco de cada 10 prendas de vestir, tres de cada 10 libros, tres de cada 10 botellas de vino, seis de cada 10 señales de televisión por cable y tres de cada 10 vía satélite son “piratas” y robadas.

El presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Puebla (Canaco), Antonio Garay Orea, exhortó a autoridades para que no sólo se dediquen a incautar artículos ilegales, sino también capturar a los delincuentes.

Ante las estadísticas, la Canaco se dio a la tarea de medir la magnitud del problema en la ciudad, y como resultado informó que 65 por ciento del mercado de software está infestado de productos “piratas”, y una situación similar se observa en el sector de las telas, que puede verse afectado 50 por ciento por la “piratería”.

“Exigimos a la autoridad que no sólo se limite a operativos de decomisos de CD, DVD, sino que también aprendan a los delincuentes", dijo Garay Orea. El presidente de Canaco dijo que la “piratería” impide el crecimiento de las empresas formales y no contribuye con las obligaciones fiscales y laborales.

Agregó que las zonas identificadas por los poblanos como principales puntos de venta destacan “La Fayuca”, con el 31 por ciento de menciones; “La Cuchilla”, con 16 por ciento, y con 12 por ciento los mercados Independencia, Hidalgo y el centro histórico.

2033

Antes de que se proyectara por primera vez la película mexicana 2033 en distintas salas de cine, cientos de personas ya habían visto el film gracias “a la magia de la piratería”. Estimaciones de los mismos productores es que se han vendido hasta 50 mil DVD “piratas” en la primera semana antes de su estreno, lo que los hace perder nueve boletos por cada venta en cines.

La producción mexicana —primera cinta de ciencia ficción de la época reciente— no se salvó de ser presa de este tipo de ilícitos, ahora se puede comprar hasta en 10 pesos en DVD en cualquier puesto donde se vendan discos “piratas”, los que existen por decenas tan sólo en la ciudad de Puebla.

Estimaciones conservadoras del sector comercio indican que ocho de cada 10 videos que se venden en Puebla son “piratas”, lo que hace de este negocio un botín millonario día con día. Es muy difícil frenar este tipo de ilícitos, ya que solamente se pueden decomisar los productos mediante una denuncia penal, pero lo cierto es que el ayuntamiento está otorgando permisos para que se establezca la piratería.