Los ritos de fin de año están a la orden del día.

Los poblanos recibirán el año nuevo con la tradición de comer las 12 uvas a la par de las 12 campanadas de la cuenta regresiva con el que finaliza el 2014.

La tradición de las uvas y la ropa interior de colores vivos, prácticas que reviven los poblanos para recibir el 2015.

Las costumbres de fin de año están listas para recibir el nuevo año 2015. A unas horas de que se reciba el nuevo año, los poblanos recurren a las tradicionales prácticas para darle la bienvenida al año nuevo.

Ahora con las selfies y los saludos en las redes sociales, los usuarios se despiden del año que finaliza.

Desde las prácticas más sensatas, como la de comer uvas, hasta las costumbres más rebuscadas, como vestir ropa interior de color roja, que se vende en tianguis o se exhibe en los aparadores de las tiendas, con el propósito de recibir este 2015.

Como en otras costumbres latinas, en México, y ciudades de este país como Puebla, quienes reciben el nuevo año comen las 12 uvas mientras se escuchan las últimas campanadas del año que se va. Los que creen en la buena suerte visten ropa de colores vistosos como el rojo y el amarillo, en la búsqueda de un mejor año en los negocios o en el amor.

No faltan los que pasean la maleta o la colocan frente a la puerta de la casa deseando realizar viajes para el 2015.

En otras zonas del país, principalmente en estados del sur como Veracruz, se quema a los viejos, figuras rellena de aserrín y de cohetes, a los que se pasea por las calles, se les canta unas coplas tradicionales para despedir el año y finalmente se les prende fuego para que estalle el viejo disparando cohetes, con lo que se quema y se olvida el año que se va.

Desde las redes sociales, la clase media se manda saludos, se colocan fotografías donde se pasa el año nuevo y se envían felicitaciones por el año venidero, a unas cuantas horas de recibir al 2015 y darle la despedida al 2014.