El albergue para familiares de personas internadas en el Hospital General de Cholula, donde se invirtieron cerca de 20 millones de pesos de recursos federales, continúa sin abrir sus puertas.

En un recorrido de Intolerancia Diario por la zona, se comprobó que el lugar permanece cerrado sin ni siquiera tener ya conectada la instalación eléctrica o el medidor de la CFE, además de estar entre montoneras de tierra o arena para construcción.

Un problema con la instalación del drenaje y agua potable, ha sido lo que ha detenido la apertura a pesar de haberse inaugurado desde el pasado 3 de febrero en la zona de San Andrés Cholula.

Debido a esta situación, decenas de familiares de pacientes continúan durmiendo en una carpa improvisada a un costado del nosocomio, en medio de mantas para cubrirse de las corrientes de aire y frío.

Mientras tanto, con toda calma avanza la burocracia para que haya una conexión de agua y finalmente la construcción millonaria cumpla su función.

De este modo, la gente sigue valiéndose por si misma en el refugio, mientras la Secretaría de Desarrollo Agrario, Urbano y Territorial (Sedatu) entregó la obra incompleta.

Obra con recursos federales

En el lugar aún se pueden apreciar partes escarbadas con montoneras de tierra y un concentrador de medidor de electricidad vació.

En el inmueble que Sedatu presumió en redes sociales actualmente todo está cerrado con cadenas a pesar de haber sido entregada la obra por el ayuntamiento de San Andrés Cholula, encargada del proyecto con recursos federales. 

La obra fue gestionada e iniciada en la administración de Karina Pérez Popoca, pero al parecer fue entregada con algunos problemas a la actual administración de Edmundo Tlatehui Percino. 

En un inicio se dijo que el albergue contará con 50 camas, espacios recreativos, capilla, áreas de descanso, baños y regaderas, sin embargo, no se ha podido dar la atención correspondiente.

Sin recursos para viajar

Dormir en el suelo, solo con un cartón de separación o una cobija, es como están pasando las noches algunos de los familiares de personas internadas en el nosocomio cholulteca.

Precisamente para evitarles está penuria se construyó el albergue que no ha sido abierto, aunque fue inaugurado hace casi tres meses.

Luego de las olas de covid-19, finalmente dejó de verse llena la carpa instalada provisionalmente a un costado del Hospital General de Cholula, donde podían resguardarse los familiares de pacientes.

Ahora solo una decena de personas pernoctan en la zona, pero en los peores tiempos de la pandemia, cuentan guardias de seguridad que cada noche llegaban hasta 100 personas.

La mayoría de las personas que requieren el servicio o albergue, son de escasos recursos, provenientes distintos municipios de la región, por lo que no pueden estar viajando diario.

De este modo, de manera improvisada, para ayudarlos se colocó una carpa de manera emergente, pero con el paso del tiempo, la misma ya requiere algunas reparaciones.

Uno de los familiares, que no quiso dar su nombre, pidió apoyo para que ya funcione el albergue, además de que no cuentan con cobijas para pasar la noche y en ocasiones ni comen por la falta de dinero.

Una semana: Tlatehui

Ante el problema de retraso, el presidente municipal, Edmundo Tlatehui Percino, aseguró que esta semana iniciará operaciones el albergue, al señalar que se han hecho las acciones necesarias para iniciar con la operatividad del recinto.

En entrevista a medios locales recordó que el espacio fue construido para recibir a las diferentes familias que requieren un lugar de descanso mientras sus pacientes son atendidos en el nosocomio regional.

“Tuvimos un atraso en el tema de la conexión de agua potable, que era uno de los inconvenientes que impedía que se pusiera en funcionamiento, pero van avanzando los trabajos, va avanzando la coordinación y confiamos que ya esté funcionando”, dijo.