El caminar de la mano de Jesús durante el tiempo de la Cuaresma significa alcanzar los caminos de vida, justicia, esperanza, salud y paz, de cara a la múltiples situaciones difíciles de guerras, inseguridad y violencia, "que vivimos" en todo el planeta, advirtió el Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Puebla, Tomás López Durán.
Además subrayó que Jesús a través de su palabra de reconciliación, durante esta época de cuaresma, es el único capaz de transformar la realidad que se vive en todos los países el globo.
Desde la Catedral Metropolitana poblana, llamó a la comunidad a abrir los ojos del interior, "los del corazón" para comenzar a transformar la crítica situación por la que atraviesa la humanidad.
Recordó que si Jesucristo, durante el período de 40 días y 40 noches en el desierto, logró derrotar las tentaciones puestas por el maligno, la población con la ayuda de Jesús y Dios logrará también salir victoriosa, siempre y cuando, se una a la palabra de vida eterna de Jesús.
"Dios y Jesús nos ofrecen caminos de vida, de justicia, de esperanza, salud, de paz a propósito de las situaciones difíciles que vivimos en todo el planeta. Esto resulta una ventana de luz, un camino que desembocará, precisamente en la proyección gloriosa, la luminosidad, que nos ofrece la fe en el hijo de Dios porque las palabras del hijo, son palabras de vida eterna en esta época tan complicada y difícil que vive el planeta".
