Acompañado de Osvaldo Benavides y Adrián Vázquez, el actor José María Yazpik realizó una intensa promoción de la obra Un hombre ajeno, que se presentará el próximo miércoles 9 de abril en dos funciones, a las 19 y 21 horas, en el auditorio del Complejo Cultural Universitario.
La obra tiene la dirección y dramaturgia de Alejandro Ricaño, un joven dramaturgo que está dando muchas sorpresas en materia de teatro.
El resultado de la obra, dijo Yazpik, ha sido muy bueno, tanto en la sala Chopin como en la gira: “Tenemos un público desde los 20 años de edad hasta los 70 aproximadamente”.
Un hombre ajeno, recalcó, es el retrato de muchas personas, ya que el protagonista vive en una depresión y soledad, a su vez de una gran crisis existencial: “La gente que acude a la obra se identifica mucho con este personaje y es que el vive una crisis que es real, actual.
”Quien diga que en su vida nunca pasado por una crisis está mintiendo, todos los humanos en algún momento de nuestras vidas tenemos una crisis, sólo que algunos las disfrazan; un día un amigo me dijo que el no tenía crisis pero acababa de comprarse un Audi, lo cierto es que tenía muchos problemas y la compra es una salida”.
El personaje central de Un hombre ajeno es Tomás, que busca refugiarse en otra ciudad después de su ruptura amorosa, así pasan cinco años hasta que decide buscar por internet a la niña de la cual estuvo enamorado cuando era un niño, buscando una salida errónea el hombre de 40 años, en lugar de enfrentarse con sus miedos y de reencontrase consigo mismo.
“Los seres humanos somos complejos, por eso nos cuestionamos todo el tiempo, incluso nos cuestionamos sobre aquello que nos va bien y no está mal, porque todos tenemos en algún momento de nuestras vidas dudas, lo importante es tener el valor de seguir adelante, yo también me he cuestionado si fue lo mejor ser actor, me he preguntado porque no me he realizado como pareja, en fin”.
Una obra íntima
“El teatro donde nos vamos a presentar —dijo— está muy bien para esta obra, ya que es una puesta chica, algo íntimo, donde tenemos pocos elementos como una pared de base, una silla, entre otras cosas, y es que la idea principal es que el público imagine mucho de lo que vamos diciendo, por eso decimos que es una obra de imaginación y de imágenes, donde la música es muy importante ya que ayuda a provocar reacciones”.
Yazpik señaló que han tenido que rechazar algunas presentaciones porque los teatros o sedes son muy grandes para esta obra: “Yo diría que lo máximo para que se aprecie bien lo que mis compañeros y yo hacemos en el escenario es hasta 600 personas, pero si son menos mejor, porque si no la gente no apreciará lo que estamos haciendo y diciendo, ya que como mencioné antes nos valemos de música, movimientos, gesticulaciones”.
Recalcó que no busca hacer un gran negocio con la obra: “En este caso si nos presentamos en un lugar aunque sea pequeño preferimos repetir la fecha para que así la gente vaya a ver Un hombre ajeno, disfrute de la obra y también si quiere se cuestione de lo que está haciendo actualmente”.
Fuera de esta obra, dijo que tiene un proyecto y deseo de llegar un día a dirigir, pero mientras esto llega continúa haciendo los suyo que es la actuación y centrado en el papel de Tomás de la puesta Un hombre ajeno, así como espera el estreno de la cinta El jesuita, donde comparte créditos con Neal McDonouhg y Paz Vega, y prepara un documental sobre el narcotráfico en el país.
Los boletos se pueden adquirir en las taquillas del Complejo Cultural Universitario, en el sistema electrónico de Súper Boletos. Zona VIP: 500 pesos, Zona Preferente VIP: 450 y Zona Galería: 300 pesos.