La crisis en Europa pudiera afectar la inversión y el financiamiento que ese continente destina hacia América, advirtió el vicepresidente del sector privado del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Steven Puig.

“Los ámbitos de transmisión son en cuanto a inversión que pueda provenir desde Europa, seguido del financiamiento que procede de instituciones europeas que de repente se enfoquen sólo en sus casas matrices, y desde el punto de vista comercial”, expuso.

También advirtió la posibilidad de afectación al flujo comercial entre ambas partes, pues ante una desaceleración de la economía en general, “corremos el riesgo de que se afecte socialmente cualquier país”.

Ante un menor crecimiento económico, dijo, existe también la posibilidad de que aumente el número de personas en estado de pobreza en la región.

Aclaró que “En materia comercial, durante los últimos años, antes de que aconteciera lo de Grecia y otros países de Europa había una tendencia en donde la participación relativa de Europa en cuanto al comercio venía decreciendo y la inversión también”.

Un fenómeno similar se registra en cuanto a la inversión de Estados Unidos en países de América Latina, y en contraparte se observa más inversión entre los propios países de la región y la procedente de Asia.

En la conferencia, el vicepresidente del sector privado del BID también se refirió al tema de la inseguridad como un fenómeno que padecen varios países, pero también dijo que los grandes inversionistas saben que aún pueden confiar en México.

Puig asistió a la ceremonia de inauguración de la conferencia PPPAméricas, Las lecciones aprendidas para el éxito de Participación Público-Privadas (PPP) que se lleva a cabo en esta ciudad.

En su participación subrayó que para cerrar la brecha de competitividad en infraestructura entre América Latina y Asia, debería haber una inversión constante equivalente a 9.0 por ciento del PIB hasta el año 2020.

Además, para crear infraestructura y servicios públicos que funcionen y beneficien a toda la población, la administración pública y el sector privado tienen que trabajar en forma coordinada.

“Un mejor entorno regulatorio y procesos más transparentes para implementar PPP pueden generan nuevas oportunidades de negocios para las empresas”, sostuvo.