Cuba exhortó a Estados Unidos a evitar, lo que calificó de robo de marca, tras la decisión de la Corte Suprema de ese país de no renovar la patente del ron Havana Club.
Una declaración de la Cancillería publicada el jueves en el periódico Granma dio cuenta de la decisión del máximo tribunal norteamericano del 14 de mayo, denegando a la firma Cubaexport la posibilidad de defender su derecho a renovar el registro.
La nota oficial indicó que la Oficina de Marcas y Patentes de Estados Unidos no puede hacer la inscripción --como lo hizo desde 1976 a 2006-- debido a la negativa de Oficina para el Control de Activos Extranjeros, adscrita al Departamento del Tesoro, a otorgar a la entidad cubana una licencia requerida.
"El Ministerio de Relaciones Exteriores demanda al gobierno de los Estados Unidos otorgar de inmediato la licencia que permita a la entidad cubana Cubaexport renovar la marca Havana Club", indicó la declaración.
Si las autoridades norteamericanas no actúan serán responsables "del robo de la marca Havana Club a su legítimo titular, la compañía Cubaexport, y de las consecuencias negativas que pudieran derivarse de este hecho para la protección recíproca de la Propiedad Industrial", advirtió además.
Durante años la marca estuvo registrada aunque sin explotación pero en los 90 Cuba se asoció con compañía francesa Pernod Ricard con la cual comenzó a distribuir en más de 100 países el afamado ron Havana Club fabricado en la isla.
El fallo de la máxima corte de Estados Unidos fue el fin de un pleito que comenzó en los 90 con la firma Bacardí, pues esta busca vender rones con esa marca en el mercado estadounidense el mercado más grande del mundo y en el cual las leyes del embargo le impiden la entrada a los productos cubanos.
La Organización Mundial del Comercio apoyó los reclamos de Cuba y Pernod Ricard.
Según el comunicado, la Oficina de registros extranjeros rechazó emitir la licencia correspondiente pues "el Departamento de Estado había ordenado no hacerlo debido a que ello no se correspondería con la política de los Estados Unidos hacia Cuba".
"Cuba ha respetado invariablemente, sin la menor discriminación, las obligaciones contraídas en virtud de los instrumentos jurídicos internacionales referidos a la Propiedad Industrial, lo cual ha garantizado que más de cinco mil marcas y patentes norteamericanas se beneficien y continúen beneficiándose de su registro en nuestro país", comentó la nota de la cancillería isleña.