La deuda pública de México permanecerá estable en los próximos años pese al desplome que verá la economía en el 2020 por la pandemia de Covid-19, estimó hoy miércoles el gobierno.

La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador planteó en el proyecto del presupuesto 2021 una reducción en el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) a un 53,7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), desde el 54,7 por ciento esperado para 2020.

"El propósito es dejar la deuda pública igual que como la recibimos, considerando el Producto Interno Bruto del país", indicó el mandatario mexicano en su habitual rueda de prensa diaria, acompañado por el secretario de Hacienda, Arturo Herrera.

En su intervención, Herrera explicó que la reducción en los niveles de deuda estará apoyada por los llamados "remanentes" de operación del Banco de México (Banxico), que el gobierno estima recibir en el 2021.

Los remanentes dependen de las variaciones del tipo de cambio y por ley deben destinarse en parte a la reducción de la deuda gubernamental, recordó el funcionario.

"De tal forma que estamos esperando alrededor de 150.000-250.000 millones de pesos como un piso mínimo, que ayudaría a disminuir todavía alrededor de un punto porcentual más la deuda", dijo el ministro.

"Los estimados de mediano plazo que tenemos, y una vez que pase la contingencia del Covid-19, nos permiten plantearnos una ruta a través de la cual va a ir descendiendo la deuda como porcentaje del PIB a lo largo de toda la administración", añadió.

México terminó el 2019 con una deuda del 44,8 por ciento del PIB, pero se ha acelerado por un cambio en la valuación de las divisas extranjeras y por el desplome que verá la economía en el 2020 ante el nuevo coronavirus.

El gobierno estima una caída del PIB del 8,0 por ciento en el 2020, con una recuperación del 4,6 por ciento en el 2021, según el proyecto presupuestal enviado al Congreso el martes

Con información de Xinhua.