Delfino Rodríguez Moctezuma, albañil, de 30 años de edad, pidió el auxilio de la justicia, luego de que fue víctima de un prestamista, quien "al estilo de la mafia" le cobró los réditos de una deuda ‚Äîmil pesos a la quincena‚Äî a base de golpes y amenazas, y pese a que con estos mismos intereses ya le pagó la deuda en su totalidad, este sujeto le dijo que todavía le debe lo que le prestó, además lo tiene amenazado de muerte para que le siga entregando dinero.
Delfino acudió ante el agente del Ministerio Público de la Delegación Oriente para presentar la denuncia por el delito de lesiones y amenazas en contra de un prestamista del que sólo dijo se llama Miguel, de quien las autoridades investigadoras se reservó su identidad y domicilio.
Este sujeto le prestó a la esposa del alarife una suma de dinero del que le dijo le iba a cobrar mil pesos cada 15 días de intereses, agregando que la suerte principal ‚Äîel dinero prestado‚Äî ya se lo pagó con los puros intereses, pero aún así le sigue cobrando.
El afectado dijo que el sábado llegó Miguel "N" a su casa, ubicada en Granados 5033 de la colonia Bosques de Manzanilla y le dijo que iba por el pago de los intereses. Delfino le dijo que era la última vez que le daba los mil pesos y le pidió le entregara el pagaré que firmó su esposa, para que se diera por terminada la deuda.
Miguel jaló del brazo a su víctima, lo sacó a la calle y comenzó a golpearlo, luego le quitó el dinero mientras lo amenazó con que atentaría contra él o alguien de su familia si no seguía entregándole el dinero, por lo que el afectado decidió denunciarlo y solicitar la intervención de la justicia para que el "usurero" lo deje en paz.
Desde hace 10 años le debe mil pesos y no se los quiere pagar
Teresa Castillo Santillán, ama de casa, de 70 años de edad, denunció que el suegro de su hija la golpeó con los puños causándole lesiones en el rostro, luego de que ella le fue a cobrar los mil pesos que desde hace 10 años le prestó, por lo que éste se ofendió y tras golpearla la amenazó para que no lo volviera a molestar.
Armando Mendoza, el agresor, es dueño de una tortillería ubicada en la colonia Cuauhtémoc. Fue en este lugar donde agredió a su consuegra para hacerse el desentendido de una deuda de hace más de 10 años, que si le puede pagar ya que es dueño de un negocio prominente, sólo que se niega a hacerlo.
Teresa, quien vive en esa misma colonia, dice que cuando le prestó el dinero a su consuegro ella se encontraba bien económicamente, que no le había cobrado el dinero porque no lo necesitaba, pese a que Armando, conocedor de la deuda, ya le había dejado hasta de hablar para no pagarle.
La mujer de 70 años de edad dice que actualmente tiene problemas económicos y que se vio en la necesidad de cobrar esos mil pesos, pero además de que no se los pagaron su deudor terminó por darle una golpiza.
Elementos de la Policía Ministerial del Estado (PME) se encargan de las investigaciones correspondientes.