Fernando Fabila Castilla, uno de los presuntos asaltantes de la Joyería Leo, de la 5 de Mayo 207, donde fue herido y muerto el elemento de seguridad privada Braulio Barragán Sánchez, es un “pájaro de cuentas”, tiene antecedentes penales por robo a mano armada y la última vez que estuvo en poder de la justicia, aunque lo dejaron ir, fue quien el 24 de junio pasado, cuando en menos de 30 minutos asalto tres gasolineras del sur de la ciudad.
Fabila Castilla fue detenido por elementos de la Policía Municipal Preventiva (PMP), tras ocultarse en un consultorio de oftalmología, en 3 Sur 110, es uno de los sujetos que disparó a quemarropa contra el policía y lesionó a golpes a dos empleados, para apoderarse de al menos 30 anillos de oro de 10 kilates, que se encontraban en exhibición.
El delincuente de marras fue detenido junto con Jesús Antonio Cerrillo Rosales, de 41años de edad, que fue ubicado por los municipales cuando se daba a la fuga; ambos sospechosos de asalto y robo calificado, fueron presentados en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal.
Se dijo que los delincuentes ingresaron a la joyería, que amagaron con armas de fuego a los dos empleados y que fue Fernando Fabila quien disparó en contra del policía, para que el segundo se apoderara de una charola de anillos de oro, luego los salieron corriendo sin percatarse de que elementos de la Policía Municipal llegaban en esos momentos.
El lesionado fue auxiliado por paramédicos que de inmediato iniciaron su traslado al Hospital de la Cruz Roja, sin embargo falleció en el camino, dando paso a las investigaciones por parte del Ministerio Público de Homicidios, quien se hará cargo de las respectivas investigaciones.
Negro historial
Fernando Fabila Castilla, el 24 de junio pasado, fue detenido por elementos de la Policía Municipal Preventiva (PMP), luego de que armado con una pistola de gas y a bordo de una motocicleta asalto, en menos de media hora, tres gasolineras que se ubican entre boulevard Valsequillo y Periférico, llevándose 8 mil pesos en efectivo.
Al momento de ser presentado ante las autoridades correspondientes se dijo que antes de ser detenido –ese día—ya había ingresado a prisión por el delito de robo a casa habitación.