A las 8 horas del lunes 11 de marzo, el representante social adscrito a Huejotzingo fue informado de que en la casa 43 de la calle Reforma, un joven de 17 años de edad se había quitado la vida, ahorcándose con un mecate en una de las vigas de su recámara, por lo que se apersonó con todo su equipo de investigación para tomar conocimiento de lo ocurrido.
Antes de la llegada del agente del Ministerio Público, a esa casa llegaron paramédicos de la Cruz Roja, alertados por los familiares del estudiante que en vida se llamó Andrés y tenía 17 años de edad, mismos que lo revisaron y constataron que ya no tenía signos vitales.
Los familiares del adolescente estuvieron presentes durante las primeras investigaciones, dijeron que Andrés se encontraba bastante deprimido, ya que al parecer había terminado relaciones con una mujer casada y más grande de edad.
El fuero de lo común, además de las diligencias del levantamiento de cadáver, abrió investigaciones para ubicar e interrogar a la mujer con la que presuntamente el adolescente sostenía relaciones, porque podría tratarse del delito de corrupción de menores.