Durante la tarde y noche del lunes 18 de noviembre, una mujer vecina del municipio de Chignahuapan recibió varios mensajes a su teléfono celular, que le indicaban que su esposo había sido secuestrado y le exigían determinadas cantidades de dinero para entregarlo con vida, pero no les hizo caso, pensando que se trataba de una broma. La mañana del martes apareció el cuerpo sin vida de su esposo, a la orilla de un camino que conduce a la población de Cuacoyunga, presentando lesiones con arma “blanca”.
El agente del Ministerio Público de Chignahuapan tomó conocimiento de la muerte de Crisóforo Martínez Márquez, quien contaba con 39 años de edad, mismo que presentaba múltiples heridas con arma blanca, por lo que su cuerpo fue trasladado al anfiteatro del panteón municipal para que el médico legista se hiciera cargo de la práctica de la necropsia.
A las 7:30 horas del martes 19 de noviembre el fuero de lo común inicio investigaciones del caso de presunto secuestro, dando entrada a la averiguación previa 465/2013/CHIGNAHUAPAN, girando un oficio para que agentes de la Policía Ministerial Estatal (PME) se hicieran cargo de las investigaciones correspondientes.
La esposa del occiso dijo a las autoridades que desde la tarde del lunes comenzó a recibir mensajes a su teléfono celular que le indicaban que su esposo estaba secuestrado y le pidieron diversas cifras de dinero para el rescate, pero dijo que no hizo caso pensando que se trataba de una broma.
El martes le informaron que su esposo había aparecido sin vida y que fue asesinado en forma violenta.
