Tras más de un año, se esclarecen los hechos detrás de la desaparición de Guillermo Raúl López Escobedo, un joven de 27 años que fue visto por última vez el 28 de diciembre de 2023 en el municipio de Amozoc, Puebla. Aunque las investigaciones han avanzado, su paradero sigue siendo desconocido.

Ese día, Guillermo Raúl acudió al domicilio de su amigo José Wulfrano Ulises N. con la intención de venderle una computadora portátil por 12 mil pesos. Sin embargo, lo que parecía ser un trato entre conocidos terminó en una emboscada. De acuerdo con las indagatorias, Ulises instruyó a su cómplice, Gerardo N., para seguir a la víctima y despojarla de sus pertenencias.

Con ese propósito, Gerardo presuntamente le disparó con un arma de fuego y, tras herirlo, lo arrojó a una barranca conocida como “Mirtos”. Hasta ahora, no se ha confirmado si Guillermo Raúl logró sobrevivir a la agresión.

La Fiscalía General del Estado de Puebla informó el 8 de abril de 2025 que, tras reunir diversas pruebas, lograron establecer que Ulises fue quien dio la orden directa a Gerardo para interceptar al joven, dispararle y luego deshacerse de él arrojándolo al barranco. Desde entonces, nada se ha sabido de López Escobedo.

Ulises N. fue detenido el 26 de febrero de 2024, cuando las autoridades hallaron mensajes de texto en su teléfono celular que lo vinculaban con la planeación de una desaparición. Estos mensajes, intercambiados con otra persona, datan del 19 de octubre de 2023, poco más de un mes antes de que Guillermo desapareciera. También se confirmó que el último lugar donde fue visto fue precisamente en la casa de su supuesto amigo.

La Fiscalía lo señaló como probable responsable del delito de desaparición cometida por particulares, en su modalidad de privación ilegal de la libertad con el fin de ocultar el paradero de la víctima.

Familiares de Guillermo relataron que, antes de su desaparición, éste le había prestado una motocicleta a Ulises. Como no se la pagó ni devolvió, Raúl acudió con su padre a exigir una respuesta, lo cual podría haber sido el motivo que rompió la relación entre ambos y provocó el crimen.

Finalmente, tras más un año de investigación, la Fiscalía logró ejecutar una orden de aprehensión en contra de Gerardo N., de 29 años de edad. Fue ubicado y detenido en Amozoc, y actualmente se encuentra a disposición del Juez de Control, acusado de desaparición cometida por particulares.