A unos días de haberse emitido la sentencia de seis años de prisión contra Javier N por el delito de violencia familiar en agravio de Cecilia Monzón, la familia de la activista y abogada reiteró que, si bien el fallo representa un paso importante, la justicia aún no se ha concretado.
Con la condena por violencia familiar ya dictada, la familia Monzón centra su lucha en lograr justicia plena por el feminicidio de Cecilia, convencida de que la sentencia más importante aún está por venir.
En un pronunciamiento, los familiares destacaron que el juicio por feminicidio, ocurrido el 21 de mayo de 2022, sigue en curso, y exigieron la pena máxima de 60 años de prisión para todos los responsables, incluido el propio López Zavala, acusado como autor intelectual del crimen.
“El fallo representa un avance significativo en nuestra incansable búsqueda de justicia, aunque lamentamos que no se haya considerado la violencia ejercida contra mi hermana como un agravante”, señala el documento, en el que también confirman que analizan apelar la sentencia por la valoración de la pena.
Impunidad estructural
Cecilia Monzón, reconocida por su activismo en defensa de los derechos de las mujeres, denunció en vida los actos de violencia de los que fue víctima, enfrentándose a un sistema judicial que, como miles de víctimas en México, le puso obstáculos en lugar de respuestas.
Para la familia, esta sentencia por violencia familiar visibiliza de forma oficial la agresión sufrida por Cecilia, pero también expone las fallas estructurales del sistema judicial frente a los casos de violencia de género.
“Reconoce legalmente su lucha y visibiliza la impunidad estructural que enfrentan miles de mujeres en México”, expresaron en el comunicado.
Justicia, memoria y reparación
Desde el feminicidio de Cecilia, la familia ha recibido el respaldo de organizaciones feministas, de derechos humanos, y de instituciones públicas.
En texto agradecen el acompañamiento de la Fiscalía General del Estado de Puebla, la Secretaría de las Mujeres del Estado, así como del Consulado General de España en México, país del que Cecilia también tenía nacionalidad.
La familia reiteró su compromiso de continuar la lucha por justicia, no solo para Cecilia, sino para todas las víctimas de violencia familiar y feminicidio.
En ese sentido, insistieron en que el Poder Judicial debe enviar un mensaje contundente: la violencia contra las mujeres no puede quedar impune.
“La memoria de Cecilia y su legado vivirán en reformas como la 'Ley Monzón', que nos guían en esta batalla por la verdad, la justicia y la reparación del daño”, afirmaron.
Juicio por feminicidio
El proceso más importante aún está en curso: el juicio por el feminicidio. La familia advierte que el sistema judicial tiene ahora una oportunidad crucial para sancionar con toda la fuerza de la ley a los responsables del asesinato, garantizar el acceso a la verdad, y evitar la revictimización de quienes alzan la voz ante la violencia.
Para las y los allegados de Cecilia, esta lucha no es solo legal, sino histórica y simbólica: busca marcar un precedente para que ninguna mujer que denuncie vuelva a ser silenciada, y que el derecho a la vida, a la justicia y a la verdad, se respete sin distinción ni dilación.
