La Corte Penal Internacional (CPI) acusó hoy al líder libio Muammar Gadafi de usar la violación sexual como un arma de guerra contra cientos de mujeres, en un intento por frenar a los rebeldes que luchan por su renuncia.

“Se tienen pruebas de que el líder libio Muamar Gadafi ordenó violaciones masivas y compró cargamentos de drogas sexuales para que las tropas atacaran a las mujeres”, aseguró Luis Moreno-Ocampo, fiscal general del la CPI, con sede en la ciudad holandesa de La Haya.

En declaraciones a la prensa, Moreno-Ocampo dijo que se trata de un nuevo aspecto de la represión del coronel Gadafi, que se sumará a los otros cargos imputados en su contra, según un reporte de la emisora Radio Nederland.

El fiscal pidió una orden de arresto contra Gadafi, su hijo Saif al Islam y el jefe de Inteligencia libio, Abdulá al Sanussi por su presunta responsabilidad en crímenes contra la humanidad, asesinato y persecución contra la población civil libia.

Moreno-Ocampo aseguró que el tribunal internacional dispone de evidencias que señalan que el régimen repartió medicamentos y ciertos estimulantes sexuales, como Viagra, entre los soldados para que se llevaran a cabo las violaciones sexuales.

"La violación es un nuevo aspecto de su represión, teníamos dudas al comienzo pero ahora estamos más convencidos de su existencia (...) Estamos recibiendo información de que Gadafi en persona decidió las violaciones", subrayó el magistrado argentino.

El fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI) dijo que la fiscalía cuenta con informes de cientos de mujeres que han sido agredidas en algunas zonas de Libia, donde se libran los combates armados, aunque no dio más detalles.
 

En marzo pasada, Eman al-Obeidy, acaparó los titulares de la prensa internacional, al afirmar que ella y otras mujeres habían sido violadas por las tropas de Gadafi.