La organización Al Qaeda prometió hoy continuar con su Yihad (Guerra Santa) contra Estados Unidos e Israel, bajo el liderazgo de Ayman al Zawahiri, designado sucesor de Osama Bin Laden, tras su muerte el 2 de mayo pasado.
En una declaración difundida en una página islamista, poco después de anunciar que el jeque al Zawahiri sucederá a Bin Laden, la red terrorista elogió la labor que desempeñó como su número dos de la organización y le deseó éxito en su liderazgo.
El cirujano, de nacionalidad egipcia, fue designado este jueves como sucesor de Bin Laden, abatido la madrugada del 2 de mayo pasado por un comando espacial de la marina estadunidense en asalto a su residencia de la localidad paquistaní de Abbottabad.
En su comunicado, el grupo extremista afirmó que bajo el nuevo liderazgo de al Zawahiri, Al Qaeda promete seguir “sin descanso su Yihad contra Estados Unidos e Israel hasta lograr la liberación de la tierra del Islam, según un reporte de la cadena árabe Al Bawaba.
“Buscamos con la ayuda de Dios para pedir la religión de la verdad e incitar a nuestra nación para combatir ... llevando a cabo la yihad contra los invasores de los cruzados de Estados Unidos y su siervo Israel, y de quien los apoya, destacó el comunicado.
Al Qaeda aseguró que su lucha continuará hasta que todos los ejércitos invasores dejar la tierra del Islam e hizo hincapié en que jamás reconocerá de ninguna manera la “legitimidad del Estado llamado de Israel".
"No vamos a aceptar o adherirse a cualquier acuerdo que reconozca que (Israel) o que le robe una milla de Palestina, aún si se trata de las Naciones Unidas (ONU), controladas por criminales superiores, o cualquier otra organización", indicó.
En su declaración, la red terrorista también expresó su apoyo a los levantamientos de “nuestro oprimido pueblo musulmán contra los dirigentes corruptos y tiranos que han hecho de nuestro pueblo sufra en Egipto y Túnez”, indicó.
Al Zawahri, considerado jefe organizador de Al Qaeda y el más cercano al fallecido Bin Laden, nació en 1951 en el seno de una distinguida familia de El Cairo, es hijo de un profesor de farmacología y nieto del gran imán de Al Azhar, la mezquita más importantes del mundo árabe.
El nuevo líder de Al Qaeda y Bin Laden se conocieron a mediados de la década de 1980 en la ciudad paquistaní de Peshawar, donde se entrenaban como mujaidines (combatientes islámicos) para luchar contra las tropas soviéticas en Afganistán.