La resolución estableció asimismo que a partir del último día de este mes se pondrá también fin a la zona de exclusión aérea, que tenía como propósito impedir una ofensiva con aeronaves por parte del régimen de Muamar Gadafi, quien murió la semana pasada.
Asimismo, “modifica las disposiciones del embargo de armas” a Libia y levanta el congelamiento de activos de las petroleras y bancos libios.
El texto pasó por alto la solicitud del Consejo Nacional de Transición, al frente del gobierno interino libio, para que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) permaneciera por más tiempo en Libia con objeto de evitar que las fuerzas leales a Gadafi se pudieran reagrupar.
Las medidas revocadas hoy habían sido aprobadas el 17 de marzo pasado con el propósito expreso de proteger a la población civil de Libia y evitar un mayor baño de sangre a causa de los enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de seguridad de Gadafi.
En esa resolución se aprobó el uso “de todas las medidas necesarias” para proteger a la población, salvo el uso de tropas en el terreno.
El texto de hoy fue promovido por Rusia, país que ha sido crítico de la intervención militar en Libia debido a que, a su juicio, extendió su mandato de protección a civiles para promover un cambio de régimen, algo ajeno a la resolución de marzo pasado del Consejo de Seguridad.
En ese sentido, el embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, indicó que espera que la OTAN actúe en concordancia con la resolución aprobada hoy.